La Politécnica de Barcelona estudia limitar las plazas en todos sus centros
La junta de gobierno de la universidad Politécnica de Cataluña (UPC) estudia ampliar la limitación del número de plazas nuevas de primer curso a todos sus centros. Si la propuesta, hecha por el equipo rectoral y apoyada por la comisión de reordenación académica, prospera, la tercera universidad catalana extenderá el numerus clausus en primer curso a su treintena de centros y prácticamente todos los centros universitarios catalanes estarán sometidos a numerus clausus.En el anterior curso 1988-1989, la UPC limitó las plazas de primer curso tan sólo en 12 centros propios y ocho adscritos. "Al no establecer límites en algunos Centros tuvieron que soportar una matrícula muy elevada, que a veces desbordó su capacidad", explicó Jaume Pagés, vicerrector de reordenación académica de la UPC, que citó el caso de la Escuela de Aparejadores de Barcelona, que con una matrícula de unos 500 alumnos el curso pasado sufrió una avalancha de casi el doble.
Otras escuelas de la UPC vieron incrementar el número de alumnos nuevos de manera espectacular, como la Escuela Politécnica Universitaria de Manresa, que acogió siete veces más de los alumnos previstos (779 en vez de 109), la Escuela de Ingenieros de Caminos que admitió el triple de alumnos previstos (325 en lugar de 133) o Arquitectura del Vallés donde se quintuplicó la matrícula (209 alumnos nuevos cuando sólo la solicitaron en la preinscripción 48 alumnos).
El equipo rectoral solicitará hoy la limitación de plazas nuevas a todos los centros, con lo que por primera vez se verán limitadas las admisiones de primer curso en Ingenieros de Caminos, Arquitectura del Vallés, Aparejadores de Barcelona y las escuelas universitarias politécnicas de Manresa y Gerona, y algunos centros privados adscritos, como la Escuela de Ingenieros Técnicos Industriales de Mataró.
