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Incidentes al izarse las banderas en las fiestas de Bilbao

La Ertzaintza (policía autonómica vasca) detuvo ayer a siete personas durante los incidentes ocurridos ayer a partir de las ocho de la mañana, cuando fueron colocadas las banderas oficiales en el Ayuntamiento de Bilbao -tal como había aprobado la corporación el pasado 14 de julio con motivo de la celebración del día grande de las fiestas de la capital vizcaína. Según el Gobierno vasco, los disturbios se iniciaron en el instante en que se izaba la bandera española, cuando unas 200 personas intentaron penetrar en el recinto municipal a la vez que lanzaban piedras contra el edificio.

El cuerpo antidisturbios de la Ertzaintza, cuyos miembros son denominados popularmente beltzas (negros), cargó duramente contra los manifestantes. Los enfrentamientos duraron unas tres horas. Los detenidos han sido puestos a disposición judicial y a algunos de ellos se les sometió a la prueba de alcoholemia, que dió resultado positivo. Algunos manifestantes resultaron heridos.Las banderas -de Bilbao, Vizcaya, Euskadi y Españafueron recibidas con gritos en favor de la ikurriña y en contra de la enseña española. Tras varios minutos en que los incidentes se limitaron a gritos de protesta, parte de los concentrados ante el Ayuntamiento comenzaron a amontonar vallas y preparar barricadas. Otros grupos empezaron a arrojar piedras contra la fachada de la casa consistorial, momento en el que intervinieron los beltzas.

La protección de la Ertzairitza había sido solicitada previamente por el alcalde de Bilbao, José María Gorordo. También hizo acto de presencia una dotación del Cuerpo Nacional de Policía, aunque su intervención se limitó a impedir que los manifestantes alcanzasen el centro de la ciudad.

Por otro lado, a las 0.30 horas de ayer estalló una bomba colocada bajo un Renault 9 TSE, propiedad de un miembro del Cuerpo Nacional de Policía, que estaba aparcado en la calle de Zamacoa, de Bilbao.

No se produjeron desgracias personales al no circular nadie por esa calle en el momento de la explosión. Según las primeras hipótesis policiales el desprendimiento del sistema de activación y su caída al suelo provocó la explosión de la bomba. El explosivo estaba compuesto por un kilogramo de goma 2.

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Por otra parte, Rosa López Garnica, alcaldesa de Estella (Navarra), ciudad donde ETA asesinó el domingo pasado a dos guardias civiles, ha denunciado habér sido objeto de amenazas telefónicas.

Tras el atentado, la alcaldesa, apoyada por todos los partidos políticos del consistorio, había destituido al concejal de Herri Batasuna en el ayuntamiento de Estella, Patxi Lage, de su cargo de presidente de la comisión de Sanidad y Medio Ambiente, por entender que "es una enorme contradicción no condenar unos asesinatos y presidir al mismo tiempo una comisión municipal de Bienestar Social", informa Mikel Muez desde Pamplona.

También el Ayuntamiento de Pamplona aprobó, con el voto favorable de Unión del Pueblo Navarro, PSOE, AP y Unión Demócrata Foral, y la abstención de HB y Eusko Alkartasuna, una moción en la que se expresa "el más sentido pésame" de la corporación a los familiares de los dos guardias asesinados.

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