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Los secuestradores asesinan a otro pasajero

Ángeles Espinosa

Un segundo pasajero fue asesinado ayer por los secuestradores del avión kuwaití desviado hace una semana de su ruta y que, desde el pasado viernes, se encuentra inmovilizado en el aeropuerto chipriota de Larnaca. La ejecución se produjo poco después de las tres de la tarde (una de la tarde, hora peninsular española) tras cumplirse un nuevo ultimátum dado por los piratas del aire para que se les suministrara combustible. A las 0.30 de esta madrugada, el generador que alimenta el aire acondicionado del avión tuvo que ser cambiado a petición de los secuestradores, que se quejaban de que el humo invadía el interior del aparato.

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Según los secuestradores, la situación en el interior del Boeing era tal que fue necesario utilizar las reservas de oxígeno. Después de cambiarlo, los técnicos chipriotas explicaron a los secuestradores que el generador había quedado mal conectado al aparato tras una de las revisiones que se efectúan cada ocho horas desde que el avión llegó a Larnaca. "No hubo mala intención", dijo la torre de control a los secuestradores, "sucede que las líneas aéreas chipriotas no utilizan aviones Boeing 747".

La Organización de los Oprimidos de la Tierra, un grupo fundamentalista islámico libanés, en un comunicado mecanografiado en árabe enviado a una agencia de noticias occidental en Beirut, amenazó ayer con matar al militar norteamericano William Higgins, secuestrado en Beirut el pasado 17 de febrero, si el Boeing 747 de la compañía aérea Kuwait Airways, es tomado al asalto.

Los piratas del aire, que solicitan la liberación de 17 presos convictos de varios atentados cometidos en el Emirato en 1983, ya recibieron anteayer el respaldo de la organización integrista Yihad Islámica, a la que pertenecen los 17 detenidos. Un comunicado de dicho grupo hecho público el domingo en Beirut amenazaba con el asesinato de todos los rehenes norteamericanos y franceses que mantiene en su poder en Líbano, si el reactor es asaltado por fuerzas especiales de intervención.

Las autoridades chipriotas, por su parte, se niegan a abastecer de queroseno al avión respondiendo a la solicitud del Gobienio kuwaití, que teme que los terroristas puedan dirigirse a un destino que garantice su inmunidad.

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El Gobierno kuwaití, que ayer seguía insistiendo en su negativa a negociar con los secuestradores, estaba dispuesto a dar la orden de asalto si no se lograba una solución rápida del asunto. La amenaza de Yihad Islámica ha puesto en marcha un proceso de consultas diplomáticas que ha retrasado esa salida.

La Yihad Islámica, que toma su nombre de la palabra con la que el Corán denomina a la guerra santa, es una organización clandestina de tendencia proiraní, especialmente activa en Líbano y que se ha responsabilizado de numerosos atentados y secuestros.

Los medios de comunicación kuwaitíes no han vacilado en señalar a Irán como último responsable del secuestro. El diario Al Qabas, bien informado en estos temas y objeto él mismo de vanos atentados, aseguraba ayer en su edición internacional que los secuestradores pertenecen al grupo de seguidores del pensador iraní Mohamed Taqueyedin Modaresi, dirigente de la organización de la Acción Islámica. Modaresi, de 42 años, es autor de varias obras que constituyen una referencia para los revolucionarios simpatizantes de la República Islámica iraní.

Al Anbaa, por su parte, informaba que tres de los piratas aéreos subieron al avión en el aeropuerto iraní de Mashad, primera escala tras el secuestro, para unirse a los cuatro terroristas embarcados en Bangkok a la salida del aparato. Este rotativo iba incluso más lejos al afirmar que las autoridades iraníes facilitaron "armas y explosivos" a los secuestradores durante los tres días que el aparato estuvo inmovilizado en ese aeropuerto, al que la Prensa internacional no tuvo acceso en ningún momento.

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Sobre la firma

Ángeles Espinosa
Analista sobre asuntos del mundo árabe e islámico. Ex corresponsal en Dubái, Teherán, Bagdad, El Cairo y Beirut. Ha escrito 'El tiempo de las mujeres', 'El Reino del Desierto' y 'Días de Guerra'. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense (Madrid) y Máster en Relaciones Internacionales por SAIS (Washington DC).

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