La policía cree que Hellín recibió apoyo económico de la trama 'ultra' para su fuga
Emilio Hellín, condenado a 43 años de prisión por el asesinato, en febrero de 1980, de la militante del Partido Socialista de los Trabajadores Yolanda González, recibió apoyo económico de la trama ultraderechista española para realizar su fuga de la cárcel de Zamora aprovechando un permiso de seis días, según informaron fuentes policiales que investigan directamente la huida. La policía, que considera que el fugado se encuentra en el extranjero, pierde la pista del ultra Hellín en Madrid cuando abandonó un vehículo alquilado en Valladolid.
La investigación de los servicios de información de la policía sobre los círculos ultraderechistas en España se mantiene con la intención de conseguir algún dato que permita salir del actual punto muerto en el que se encuentran las pesquisas. La policía mantiene, sin embargo, que Emilio Hellín recibió dinero de la ultraderecha para fugarse junto con su mujer y sus dos hijos. La razón estriba en los escasos medios con que contaba personalmente Hellín.Emilio Hellín viajó en un autocar de línea desde Zamora a Valladolid el pasado 20 de febrero, el primer día del permiso que le concedió el juez de vigilancia penitenciaria José Donato Andrés Sanz. En Valladolid se apeó del autobús y alquiló un vehículo de la empresa Avis, en el que se dirigió a Madrid, donde ha aparecido el vehículo. Fuentes policiales han señalado a este periódico que el hecho de que sea Madrid la ciudad donde se ha encontrado el automóvil abre "un abanico de posibilidades enorme sobre qué medio de transporte utilizó Hellín para huir, previsiblemente, de España".
Estas fuentes creen que Hellín puede encontrarse ya en algún país suramericano, en concreto Chile o Paraguay, utilizando como vía de salida Portugal o Francia. Sin embargo, la Dirección General de la Policía (DGP) aún no ha recurrido a Interpol para perseguir judicialmente a Hellín en el extranjero. Fuentes policiales aseguraron que la orden a Interpol debe partir de la autoridad Judicial, en concreto del juez de vigilancia de la cárcel de Zamora.
Por otra parte, Ignacio Sierra, inspector-jefe del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), dirigió ayer en Valladolid las investigaciones sobre el permiso concedido a Hellín por el juez de vigilancia penitenciaria José Donato Andrés Sanz, informa Gonzalo Rodríguez.
Determinar las circunstancias
El magistrado Ignacio Sierra ha iniciado sus actuaciones como consecuencia del expediente abierto por el Consejo General del Poder Judicial para determinar las circunstancias que motivaron la concesión del permiso así como para depurar las posibles responsabilidades. El instructor del Poder Judicial anunció que tendría ultimado el expediente esta misma semana.
Sierra mantuvo ayer por la mañana varias entrevistas en la Audiencia Territorial de Valladolid, entre ellas, una con el citado juez de vigilancia penitenciaria y otra con el presidente de la Audiencia Territorial, y posiblemente otros contactos que incluirían al fiscal que presentó recurso en el caso.
Fuentes judiciales han indicado que la investigación sobre la decisión del juez Donato Andrés se centrará en averiguar las causas por las que éste concedió el permiso a Hellín sin comprobar la veracidad de los motivos que adujo en su petición el ultra: el que una hija suya estaba enferma y su mujer desesperada.
Otro aspecto que debe considerarse es si el juez avisó a la policía de la concesión del permiso de un penado con las características de Hellín. Esta comunicación no es preceptiva en un penado calificado de segundo grado, aunque en este caso podría ser considerada como "muy conveniente". Fuentes policiales han señalado que el juez José Donato Andrés Sanz no avisó a la autoridad gubernativa ni a la policía del permiso concedido al preso ultraderechista.
[El abogado José María Mohedano, que actuó como acusación particular en el juicio por el asesinato de Yolanda González, denunció ayer ante el Consejo General del Poder Judicial al juez José Donato Andrés Sanz por un presunto delito de prevaricación al dar permiso a Hellín, según informa Efe]
