_
_
_
_
_
Crítica:VII FESTIVAL DE JAZZ DE MADRID
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Rara comunicación

El VII Festival de Jazz de Madrid ha dado comienzo con un concierto de los que pueden colocarse en el orden de lo profundo: dentro del género de la música de cámara, que es donde más crudeza e intensidad musical suele encontrarse.Un concierto de carácter íntimo, en tonos cálidos y cercanos, a cargo del cuarteto de John Abercrombie y Mikel Brecker. El prólogo, a cargo de los brasileños Helio Delmiro, César Camargo Mariano y Paulo Moura, tuvo una orientación similar, excepción hecha de las connotaciones nacionales en la música de aquel país, y una realización escasa. Sin perder de vista la belleza de las composiciones y la forma en que fueron presentadas, el trío no llegó a rendir, pese a todo el empeño del pianista César Camargo, que se bastaba por sí mismo.

VII Festival de Jazz de Madrid

Música de cámara. Helio Delmiro, César Camargo Mariano y Paulo Moura John Abercrombie Quartet. Alcalá Palace, 5 de noviembre.

John Abercrombie (guitarra sintetizada), Mikel Brecker saxo y steiner phone), Marc Johnson (contrabajo) y Peter Erskine (batería) marcaron desde el primer momento la diferencia. Una calidad instrumental insuperable (casi insultante en el caso de Erskine para los baterías), una compenetración fuera de lo común y un perfecto dominio y conocimiento de los temas que intepretan, determinan un hecho sonoro pulido, rotundo, definitivo como el metal noble, pero con la fragilidad y delicadeza del pan de oro.

La rara comunicación que se ha establecido entre estos cuatro músicos se hace patente en su música, altamente pasional al mismo tiempo que contenida y perfectamente centrada en su órbita. En esa emoción callada juega un papel de especial importancia la utilización del silencio. Los huecos que salpican las improvisaciones y / o las partes acompañantes -aún más impresionantes- tienen un carácter dramático (y a veces incluso gestual) que jalona todo el discurso musical. La fuerza de la ausencia no sólo tiene efecto sobre lo que le sigue o antecede por contraste, sino que tiene peso en sí misma. Puede decirse que se oye lo que acaba de ser sustraído.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_