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La Comisión Trilateral asume las tesis Tokio sobre la necesidad de un 'supergobierno' económico mundial

Joaquín Estefanía

La necesidad de mi supergobierno económico mundial, formado por los representantes de los países más industrializados de Occidente -expresada en la reciente cumbre de Tokio-, fue asumida ayer por los miembros norteamericanos, japoneses y europeos de la Comisión Trilateral. La organización mantuvo ayer la segunda sesión de su asamblea plenaria, entre enormes medidas de seguridad. El portavoz norteamericano, C. Fred Bergsten, indicó que México debería ser ayudado financieramente por entidades como el Banco Mundial y el FMI, si vuelve a ajustar su economía a los nuevos precios del petróleo.

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La segunda sesión de la Comisión Trilateral reivindicó ayer la pureza de sus postulados fundacionales: la necesidad de una cooperación sistemática de los Gobiernos de los países desarrollados, para instrumentar una política. económica que lleve a una recuperación en la zona sin desequilibrios estructurales. En la cumbre de octubre de 1973, los 200 trilaterales recién constituidos hacían una declaración de intenciones que afirmaba textualmente: "Para resolver satisfactoriamente los problemas comunes, Japón, Europa Occidental, Norteamérica. deberán consultar y cooperar más estrechamente sobre una base de igualdad, para desarrollar y llevar a término políticas coordinadas en las materias que afecten a sus intereses comunes; evitar acciones unilaterales con su interdependencia y acciones que perjudiquen a otras regiones; y aprovechar las organizaciones regionales e internacionales existentes, dándoles más relieve. La cooperación trilateral será facilitada según se consiga una mayor unidad europea dentro de la CE y unas relaciones más estrechas entre Japón y Europa".

Los tipos de cambio

Los ponentes de ayer fueron el vizconde Etienne Davignon, director de la Societé Generale de Belgiquey antiguo vicepresidente de la Comisión Europea; el norteamericano C. Fred Bergsten, una de las primeras personas que abandonó la Administración Nixon en protesta por su política nacionalista; y el japonés Isamu Miyazaki, presidente del Instituto Daiwa Securities Research. Lastres personas indicaron la necesidad de una coordinación sistemática. Ejemplos de esta cooperación son la reunión. de los cinco en septiembre pasado, en la que se decidió una depreciación controlada del dólar y una disminución templada de los tipos de interés. El segundo hito ha Sido la cumbre de Tokio, sobre la que niegan la existencia de una prepotencia permanente del presidente norteamericano Ronald Reagan. Ahora se trata de que la colaboración se haga sistemática, sobre todo en lo que se refiere a la evolución de los tipos de cambio de las monedas. Estos tipos de cambio deberían evolucionar con una oscilación pactada. Cada vez que se rompiese esta oscilación, los Gobiernos intervendrían para volver a los límites impuestos. En definitiva, se trata de la creación de un nuevo sistema monetario mundial.Los costes de no llegar a esta colaboración son los de un aumento del proteccionismo en todo el mundo. Para evitar esto, se ha convocado una nueva ronda del Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio (GATT) en septiembre, en Punta del Este (Uruguay).

No se, oculta, por otra parte, que la coordinación del mundo desarrollado no significa, sino todo lo contrario, una mejora de las condiciones económicas del Tercer Mundo. Bergsten hizo una disección de la situación de la parte pobre del planeta. Según el norteamericano, la caída de los precios del petróleo ha sido, en general, favorable a los países en vías de desarrollo, al ser estos importadores netos de crudo. Sin embargo, esta misma circunstancia ha puesto en una situación límite a algunos países exportadores de la materia prima, como México o Venezuela., La coyuntura mexicana es casi insostenible, pero será necesario un nuevo ajuste a su economía para alinearla a los nuevos precios de su principal producto ex portador. "Ya sé que esto el muy difícil, puesto que México ha tenido que hacer enormes sacrificios en los años pasados, pero es imprescindible si quiere recibir ayuda financiera complementaria de las entidades internacionales como el Banco Mundial o el FMI, y de la banca privada internacional".

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