_
_
_
_
_

Vittore Branca

Descubridor del manuscrito de 'El Decamerón', de Boccaccio, cree que renace el interés por la Edad Media

En la Staatsbibliotek- de Berlín estuvo durante muchos años a disposición de los estudiosos un manuscrito del siglo XIV de Il Decamerone, de Giovanni Boccaccio, uno de los primeros éxitos de ventas en la historia de la literatura. Sólo un gran conocedor de la obra de este autor del medievo italiano como el profesor Vittore Branca pudo descubrir que esta versilón ilustrada había salido de la mano del propio autor, encontrando así la única obra medieval autógrafa de la que se tiene conocimiento. "Nací justo a 600 años del nacimiento de Boccaccio, supongo que estaba predestinado", declaró Branca.

"Hice el descubrimiento del manuscrito de Boccaccio en 1962, y fue producto de muchos años de estudio y conocimiento de su vida y obra", declara Vittore Branca, de 71 años, autor de numerosas obras sobre Petrarca, Alfieri, Manzoni y otros clásicos italianos. Un hallazgo de la importancia del suyo es, por lo general, un acontecimiento irrepetible en la vida y una confirmación de su prestigio como investigador. Sin embargo, Vittore Branca ha descubierto hace poco otro manuscrito de gran importancia: un documento de Angiolo Poliziano (importante latinista y poeta italiano del siglo XV), encontrado en la tienda de un anticuario. "Lo de Boccaccio fue por conocimiento, lo de Poliziano fue suerte", añade Branca, quien ha recibido una oferta de un millón de dólares por el manuscrito de Poliziano, que él obtuvo por la décima parte de esta suma. "Dio la casualidad que el día anterior a mi visita a este anticuario estuve en una exposición sobre Poliziano y tenía fresca en la memoria la caligrafía de este escritor". Branca es actualmente miembro de las más importantes academias de ciencias y letras en Italia, además de presidente del Istituto Veneto di Scienzi, Lettere e Arti y secretario general de la Fundación Giorgio Cini, de Venecia. Branca ha visitado España en varias ocasiones y ahora se encuentra al final de una serie de conferencias que ha ofrecido en varias ciudades del país.

La pasión de Vittore Branca por la Edad Media no se limita a la literatura. Él es una especie de nuevo profeta de esta era, hasta ahora llamada la edad oscura y que él reclama como la época en la que se forjaron los cimientos de la actual sociedad occidental. En la fundación cultural que él dirige en Venecia se cultivan todas las artes de esta época a través de talleres dirigidos principalmente a los jóvenes. "Hay una especie de renacimiento de la Edad Media en estos años", afirma Branca, recordando el éxito que ha tenido una novela como El nombre de la rosa, de Umberto Eco.

"Hace 20 años todavía se hablaba de la edad oscura; hoy en la universidad de Berkeley (EE UU) se escuchan canciones exaltando el medievo. En esta época se inventó un modelo de vida basado en la fuerza de la pasión y la sutileza".

Vittore Branca vive en Venecia, ciudad que le ofrece tiempo para poder sumirse en el pasado y recrearlo para sus contemporáneos. "Boccaccio tuvo un papel decisivo en este sentido, y no sólo a nivel literario. Él reflejó en su obra el habla. que se usaba en la Italia de entonces, usando regionalismos e inventando términos que luego algunos críticos piretendían corregir. En su época se tradujo Il Decamerone al francés, inglés, alemán y español y se hicieron cientos de copias, algo inusitado en su momento. Tirso de Molina llamaba a Cervantes el Boccaccio español, y con eso quería aludir al escritor más conocido de la época. En su obra se interpreta la fuerza del hombre: el amor, el sexo, el deseo de dinero, la astucia, el dominio de la economía sobre la política".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_