Desarticulada una organización de iraníes dedicada a falsificar pasaportes
La Brigada Regional de Información de Madrid ha detenido a dos iraníes que, junto a los tres ciudadanos de la misma nacionalidad detenidos el pasado martes en las calles de Alberto Aguilera, Belvis y Olid, integraban una organización de falsificación de pasaportes, establecida en Madrid, para facilitar documentación a personas que desean huir del régimen jomeinista. A los detenidos se les han ocupado un total de 15 pasaportes y documentos diversos, según informaron fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.Los detenidos, que ayer fueron puestos a disposición judicial tras prestar declaración ayudados por un intérprete, son Lotfollah Massavi, de 32 años; Chiniforoushan Masoud, de 23; Fallah Sadeh Sarai, de 36 años; Girafaid Masoud, de 27; y Sasani Baghche Sarai, de 35.
Los tres últimos fueron detenidos el martes pasado en las cercanías de la calle de Fuencarral, en una espectacular operación policial en la que intervino un helicóptero, que llegó a posarse en la calzada. Les fue incautado dinero nacional y extranjero, un cheque de viaje y una pasaje aéreo que cubría el recorrido Madrid-París-Teherán, así como ocho pasaportes. Sasam Baghche Sarai es considerado por la policía como el responsable de la organización.
Como consecuencia de esta primera acción policial se localizó un piso en el centro de Madrid en el que fueron detenidos los dos restantes iraníes. En la vivienda se encontraron otros siete pasaportes de diferentes nacionalidades, tarjetas de crédito extendidas a distintos nombres, numerosos cheques de viaje, documentos de identidad españoles y abundante información sobre empresas y firmas mercantiles.
Los 15 pasaportes intervenidos por la policía en el conjunto de la operación a los iraníes detenidos pertenecían a las nacionalidades francesa, española, argelina, istaelí y turca.
50.000 pesetas por pasaporte
De acuerdo con la información policial, los cinco detenidos formaban una organización dedicada a la falsificación de pasaportes y documentos personales entre ciudadanos iraníes refugiados en España y otros procedentes de Irán o de naciones europeas.A los interesados en obtener pasaporte falso se les obligaba a trasladarse a Madrid. Una vez en esta capital cambiaban su pasaporte iraní por otro falso de nacionalidad española, francesa, argelina, turca o israelí.
Sasam, Baghche Sarai, según datos proporcionados por la policía, recibía 50.000 pesetas por cada pasaporte alterado. Los miembros de la organización sustraían pasaportes del interior de automóviles de diversas nacionalidades estacionados en vías públicas de Madrid y a continuación sustituían las fotos del auténtico titular por las del iraní solicitante del documento en cuestión.
Los nuevos pasaportes permitían a los iraníes, en su inmensa mayoría huidos del régimen jomeinista, la entrada libre en Estados Unidos o en Canadá, países donde establecían su residencia la mayoría de ellos.
