Nueva etapa de Juventudes Musicales de Madrid
Vuelven a la actividad las Juventudes Musicales de Madrid después de un largo período en el que Miguel Alonso, con voluntad y tesón, ha evitado la dispersión. Ahora, su sucesora, María Isabel Falabella, plena de entusiasmo y proyectos, reinicia la andadura en circunstancias muy favorables, al menos en principio.El presidente de JME, Jordi Roch, ejerce su mandato a escala internacional y nuevas promociones de músicos y amigos de la música se incorporan a la vida de los conciertos con espíritu nuevo y nuevas demandas.
En un acto modesto y significativo, las JMI de Madrid han dado fe de vida gracias a la colaboración de la Escuela Superior de Canto, que dirige actualmente Rafal Pérez Sierra. La sala del Palacio Batier estaba plena de un público verdaderamente representativo, como si Isabel Falabella y Jordi Roch hubieran querido convocar a cuantos han de prestar su ayuda al ya tradicional empeño europeo de las Juventudes Musicales.
No menos significativa resultó la presencia de los jóvenes precisamente en el escenario. Para ellos debe ser gran parte del esfuerzo comunitario de JM. Bien lo merecen intérpreles como el pianista Alfonso Peciña, el flautista Luis Amaya y el violoncelista Enrique Fernández Rivera, que nos dieron una preciosa versión del Trío, op. 68, en sol menor, de Weber; el guitarrista Ismael Barambio tocó con buen sentido musical y bello sonido obras de Weiss, Sors, Malats, Villalobos y Salvador Bacarisse, y la liederista en agraz Virginia Prieto, en unión del clarinetista José Vicente Herrero y el pianista Francisco Luis Santiago, inauguraron la audición con esa maravilla de la lírica vocal de cámara que es Der hirt auf dem felsen, de Franz Schubert.
Actuaron en la segunda parte alumnos de la Escuela Superior de Canto, que abordaron lieders de Schubert y Dvorak, melodies de Fauré y canciones de Turina. La soprano Teresa Verdera, la mezzo Pía Moriyón y el tenor Santiago Incera, acompañados por los pianistas Fernando Turina y Xavier Parés, se repartieron la se lección y los aplausos. Esperemos el anuncio de los próximos empeños de Juventudes Musicales, después de esta carta de presentación que ha sido el acto del miércoles por la noche en la Escuela de Canto.
Las palabras de Jordi Roch e Isabel Falabella obedecían a dos ideas principales: voluntad de hacer y ánimo solidario.
