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Atentado sin daños personales contra el Centro Cultural Iraquí en Madrid

Un artefacto explosivo de alta potencia destruyó en la madrugada de ayer gran parte del Centro Cultural Iraquí en Madrid, donde unas horas después debía haberse inaugurado la exposición fotográfica Dos años de guerra, relativa al conflicto que este país sostiene con Irán. La explosión no produjo desgracias personales.

A las 4.29 horas de la madrugada, los residentes en la calle de María de Molina y sus alrededores despertaron sobresaltados: una bomba, al parecer de alta potencia, acababa de estallar muy cerca, exactamente junto a la puerta del Centro Cultural Iraquí. En principio se temió que la bomba hubiera ocasionado daños personales; la cristalería del edificio, las piezas de escayola de la techumbre y los tabiques de la planta baja estaban destrozados. Muy cerca, un coche Z de la Policía Nacional cubría su habitual turno de vigilancia desde las diez de la noche hasta las ocho de la mañana. En un pequeño departamento situado en el interior, a la derecha del portal, estaba durmiendo el vigilante jurado. Sin embargo, los primeros temores no se confirmarían. Sobre poniéndose al aturdimiento y al estado de choque que la explosión le había provocado, el vigilante pe día ayuda a grandes voces. Los agentes de la dotación del Z también parecían ilesos. Poco después llegaban al lugar varios jeeps de la Policía Municipal, un coche de bomberos y numerosos patrullas de la Policía Nacional y la Policía Gubernativa.

Una vez desviado el tráfico nocturno y acordonada la zona, los especiaistas en explosivos revisaron las dependencias del edificio en previsión de nuevas explosiones, y los bomberos comenzaron a sanear el inmueble para evitar des prendimientos: la cristalería de las cuatro primeras plantas y los tabiques, paneles y mobiliario de las dos primeras estaban casi destruidos. Poco después de las seis de la madrugada, los bomberos daban la operación por terminada, y a las 6.29 estaban de vuelta en su base del parque.

Los expertos del Grupo de Desactivación de Explosivos de la Policía Nacional opinan que la bomba había sido fabricada con una carga explosiva de una potencia equivalente a cuatro kilos de Goma 2. Probablemente la camuflaron en una bolsa de mano. Alguien que pasaba junto al portal de María de Molina, 37, descendió los dos escalones que conducen al portal, dejó allí el artefacto y siguió su camino sin ser visto por nadie.

Unas horas después, a las 7.30 de la tarde de ayer, iba a ser inaugurada en el Centro Cultural la exposición fotográfica Dos años de guerra, relativa al conflicto bélico irano-iraquí. El consejero de Prensa de la Embajada de Irak en Madrid, Khairi O. al Zobaidi, acusó al régimen iraní de ser responsable de la explosión y declaró que la exposición y las fechas conmemorativas del comienzo de la guerra eran, sin duda alguna, los verdaderos motivos del atentado.

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