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Controlada la totalidad de los incendios de la provincia de Barcelona

La totalidad de los incendios de la provincia de Barcelona estaban controlados y en vías de extinción a primera hora de la tarde de ayer, según informaron a este diario fuentes del Centro de Coordinación del Servicio de Extinción de Incendios. Las informaciones de última hora señalan que en ningún caso las hectáreas devastadas superan el número de 10.000. Al mismo tiempo, parece confirmarse que algunos incendios han sido provocados.

El último de los declarados a mediodía de ayer, en La Mota, localidad situada a unos cuarenta kilómetros al norte de Barcelona, en la comarca del Vallés, sorprendió a las fuerzas de bomberos que trabajan en su extinción con la aparición de nuevos focos, casi al mismo tiempo en que eran apagadas las primeras llamas.Pese al optimismo general, lo cierto es que algunos de los últimos incendios, en vías de extinción según los datos del Servicio de Extinción de Incendios, seguían aún ardiendo en parte. Así, el de la zona situada en ViladaBorreda, entre Berga y Ripoll, y sobre todo el de Sant Jaume de Frontaya, a escasos kilómetros del anterior, pero sin conexión. Este último incendio, aunque no era preocupante por sus dimensiones y extensión, presentaba dificultades de extinción, dado que se trata de una zona extraordinariamente abrupta y sin más carretera de acceso que un camino de tierra.

Fallece asfixiado un subteniente

En el incendio de Begas-Castelldefells, la situación era de control total, aunque se había decidido dejar un retén compuesto por una docena de coches que se confiaba serían retirados durante la noche. Precisamente en Begas se ha producido el primer accidente con consecuencias graves. El subteniente del Ejército, Rafael de Aguilar, del parque de talleres y automóviles de Sant Boi, sufrió una lipotimia mientras colaboraba en los trabajos de extinción del incendio de Begas-Castelldefells presentando graves síntomas de asfixia. Posteriormente, los médicos que le atendían descubrieron que sufría un derrame interno, a consecuencia del cuál falleció. La capilla ardiente ha quedado instalada en el Hospital Militar de Barcelona, donde estaba internado.El servicio de extinción de incendios informó a este diario que durante el fin de semana se procederá a inventariar las pérdidas de los casi cincuenta incendios habidos en Cataluña en la presente semana, especificando el tipo de terreno destruido.

Respecto a la intencionalidad de los incendios, la cautela es la característica más acusada en los estamentos oficiales. Mientras la Guardia Civil insinuaba que todo podría deberse a excursionistas, los testigos, que afirman haber visto el Simca blanco con cuatro encapuchados, coinciden todos en el color del coche y en el número de ocupantes, e insisten en la veracidad de sus declaraciones. Está, además, el testimonio de los voluntarios que ayer acudieron a sofocar el incendio de La Mota, y que comprobaron con sorpresa los distintos focos que se iban produciendo a medida que apagaban las llamas de otras zonas. A esto hay que añadir que el excursionismo se practica habitualmente en fin de semana, mientras que buena parte de los incendios empezaron el martes y otros el miércoles.

Terminó la ola de calor

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La ola de calor que ha azotado el país, que se ha dejado notar especialmente durante los últimos días, ha terminado, según manifestaron ayer a fuentes del Instituto Nacional de Meteorología. Las temperaturas volvieron a tener ayer valores más habituales en esta época del año, sensiblemente inferiores a los más de cuarenta grados que ha habido en muchas zonas.Con anterioridad al descenso de las temperaturas, varios cientos de miles de aves han muerto asfixiadas.

En la zona Media sur de Navarra, Rioja Baja y comarca de Cinco Villas, ésta de Zaragoza, murieron a consecuencia del calor 200.000 pollos y alrededor de 50.000 gallinas. Los 42,6 grados padecidos en Huesca durante dos días, la temperatura más alta conocida en la capital en lo que va de siglo, hizo que perecieran por asfixia más de 100.000 aves. El calor hizo que en zonas de Aragón y otros puntos de España se decretara la alerta roja, ante el aumento de riesgo de incendios forestales.

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