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Veintiséis familias corren el riesgo de ser desalojadas

La rehabilitación del edificio situado en la calle del Tesoro, 6, con vuelta a Espíritu Santo (56 viviendas en 1.870 metros cuadrados), podría no realizarse si en esta misma semana no se logra un acuerdo sobre el precio del inmueble entre Gerencia Municipal de Urbanismo y el propietario de la casa, el abogado José Antonio Luque. En caso de que el acuerdo final no se produzca, las 26 familias de inquilinos que viven en la finca empezarían a ser desalojadas en los próximos días.

El proyecto de recuperación de este edificio constituiría una de las primeras actuaciones municipales en el campo de la rehabilitación del casco antiguo de la ciudad. La operación consistiría en la compra del inmueble por parte del Ayuntamiento, y una vez realizadas las obras de rehabilitación, vender las viviendas a sus actuales inquilinos en condiciones asequibles para ellos. Estas condiciones consisten en el pago de 8.000 pesetas mensuales a lo largo de diez años.Las dificultades para esta actuación municipal surgieron en marzo de este año, cuando la oferta de compra al propietario descendió de diecinueve millones y medio de pesetas a once y medio. José Antonio Luque, propietario del inmueble, asegura que no puede aceptar esta última propuesta porque con la oferta inicial no ganaría una sola peseta, pero con el último ofrecimiento perdería dinero. "La casa ha sido valorada por la Abogacía del Estado en 20.087.000 pesetas", explica el señor Luque, "y veinte millones de pesetas pagué yo al comprarla, por lo que, si renuncio a ganar dinero con la operación, lo que no puedo hacer es perder. Todo surgió cuando el 24 de marzo del año pasado envié un escrito a la Diputación y otro al alcalde en el que solicitaba ayuda económica para realizar la remodelación íntegra del, inmueble, ya que sobre él pesa un expediente de ruina y su situación es peligrosa para las familias que lo habitan. Desde la Diputación me respondieron que no tenían competencias en este asunto, mientras que el 18 de septiembre del año pasado recibí una oferta del entonces presidente de la junta municipal del distrito Centro, Juan Francisco Pla, consistente en la compra del edificio por 19,5 millones de pesetas. Sin embargo, el 10 de marzo de este año recibí una citación de la nueva presidenta, Isabel Vilallonga, quien me comunicaba que el Ayuntamiento no pagaría más de 11,5 millones.

Ante este cambio de ofertas, José Antonio Luque dejó las vacaciones estivales como plazo máximo para que los responsables municipales reconsideraran su postura y, concretamente, revisaran sus ofertas económicas. En los próximos días se celebrará un nuevo encuentro entre las partes afectadas, en el que Carlos de la Guardia, gerente de Urbanismo estudiará las salidas al tema.

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