AIteración del orden público
Un día espléndido, finalizando el verano, dos señoras, con sus cuatro niños. de corta edad, se acercaron .al parque público, casi vacío. Mientras los niños hacían bolitas .de barro del suelo y las decoraban con flores, las dos amigas se contaban sus aventuras de verano.De pronto irrumpió en esta escena apacible un agente de la ley aparentemente alterado. El motivo desu intransigencia eran las bolitas puestas.encima de un banco.
Es mediados de otoño y las dos amigas se encuentran en el Juzgado de Paz de Las Rozas delante de un juez, un fiscal, un secretario, un letrado defensor del guardia denunciante y tres testigos del mismo.
¡Tanta gente deliberando sobre las dichosas bolitas de arena! En fin, no es la multa impuesta a una de las señoras lo que desconcierta, sino el pensar que mientras el guardia municipal se pasea por el parque reprimiendo a mujeres y niños, existen alteraciones reales del orden público, y graves. ¿No es hora de reflexionar sobre el papel actual del guardia municipal?