_
_
_
_
_

Jorge Martín contra Pecco Bagnaia: cuatro finales por un título entre compañeros de litera

Los candidatos al campeonato se conocen desde niños y se formaron juntos bajo el ala de Jorge Martínez Aspar en Moto3, donde jamás se imaginaron luchando juntos por la gloria en MotoGP

Moto GP
Jorge Martín, este sábado, en el circuito internacional Chang en Tailandia.RUNGROJ YONGRIT (EFE)

Jorge Martín y Pecco Bagnaia dirimen estos días una preciosa batalla por la corona de MotoGP. Ambos se conocen de toda la vida, desde que luchaban por convertirse en pilotos mundialistas como niños. En sus primeros pasos dentro del certamen, en Moto3, estrecharon lazos y se hicieron amigos, aunque en este deporte, sobre la pista, es mejor dejar los sentimientos a un lado. “Nunca imaginé que podríamos estar luchando juntos por el título”, reconoce el madrileño de 25 años.

“Cuando yo llegué, él ya tenía experiencia y siempre me ganaba, así que traté de aprender mucho de él”, añade. Ahora, en plena batalla por un sueño, es el español quien ha vuelto a demostrar su notable desarrollo sobre la Ducati para dar otro hachazo a su excompañero con una pole postion de récord y su quinta victoria consecutiva al sprint -la séptima del año- en el GP de Tailandia. El vigente campeón del mundo partirá sexto en parrilla este domingo (9:00 horas, DAZN) y cedió nueve puntos en la tabla tras terminar séptimo en la carrera corta de este sábado. Ahora, 18 puntos separan a ambos con 136 en juego.

Esta “extraña” pareja, como la ha definido el propio Bagnaia, coincidió en 2015 y 2016 bajo el paraguas del Team Aspar. “Para mí es súper bonito ver a Pecco y Jorge luchando en MotoGP. También a Marco [Bezzecchi] y Aleix [Espargaró]. Somos la semilla de todo esto y me encanta”, celebra en conversación con EL PAÍS Jorge Martínez Aspar, expiloto y responsable del equipo donde ambos sumaron su primer podio mundialista. “Siguen siendo los mismos chavales que tenía a mi lado hace seis años”, asegura. En la categoría pequeña, el español y el italiano compartían litera en el camión del equipo. Se pasaban las tardes jugando a la videoconsola, imaginándose en plena lucha por la gloria, la misma que dirimen ahora en el mundo real. “Nuestra relación se basa en el respeto, y ambos conocemos perfectamente el potencial del otro, así que siempre habrá una pelea justa entre nosotros”, afirma el número uno.

Ese potencial se traduce en uno de los finales de Mundial más emocionantes de los últimos tiempos. Cuando quedan cuatro grandes premios, les separa menos de una carrera de distancia. Ambos cuentan con el mismo paquete técnico, por mucho que uno luzca el rojo oficial de Ducati y el otro el púrpura y blanco de uno de los equipos satélite. “Jorge está en un momento de forma espectacular. Siempre le dijimos que tendría todo lo que necesitaría para ganar. Salario, moto, todas las condiciones para él son como si fuera piloto del equipo oficial”, subraya a este periódico Paolo Ciabatti, director deportivo de la marca de Bolonia. La política del fabricante, en sus propias palabras, es “que gane el mejor”.

En el paddock, todos coinciden en que Martín es ahora mismo el piloto más rápido de la categoría, pero Bagnaia cuenta con más experiencia en la mochila y un título todavía muy fresco en la memoria. “Veo más rápido a Jorge, está en su mejor momento, pero Pecco está sabiendo aguantar, pescar incluso en los malos momentos”, opina Aspar. Quienes mejor les conocen dicen que ambos son parecidos, especialmente en el trato personal. “Pecco es un piloto y una persona muy educada, técnica e informada. Quiere saberlo todo, y es reposado, no es agresivo. Martín es mucho más impulsivo. Eso sí, se ha ido puliendo y cada vez está más maduro”, analiza el mentor de ambos. “Jorge es más explosivo y tiene la sangre caliente, puede pilotar la moto incluso cuando hay problemas. Pecco lo quiero todo bajo control, tener la moto a su medida, sentirla perfecta para su estilo de pilotaje. Esa es la mayor diferencia entre ambos”, profundiza Ciabatti.

Más cuestión mental que técnica

Carlos Checa, expiloto y comentarista televisivo, subraya que los dos candidatos son capaces de extraer el máximo de la mejor moto de la parrilla. “Quizás se quitan una o dos décimas el uno del otro, y eso en una vuelta no lo aprecia el ojo humano. Solo en la telemetría se puede apreciar eso”, apunta. Precisamente, debido a la política de transparencia entre los pilotos Ducati, ambos rivales pueden estudiar sus datos al terminar cada sesión y saber, al instante, dónde están perdiendo terreno. “Para mí, a estas alturas, ya no es una cuestión técnica, sino mental, y creo que Jorge tiene menos presión y más ventaja, llega más fresco”.

Martín rebosa confianza a pesar de haberse llevado dos mazazos importantes en los últimos grandes premios. En el GP de Indonesia cayó cuando lideraba con mucho margen en cabeza y vio como Bagnaia aprovechaba su error y sumaba su sexta victoria del año en domingo para recuperar el liderato del certamen, que le duró apenas 24 horas al español. En Australia, la semana pasada, un error estratégico le hizo caer de la primera a la quinta plaza en la última vuelta, con el italiano pescando de nuevo con un segundo puesto. “Quizás fue exceso de confianza”, interpreta Aspar sobre los últimos errores del madrileño. De la misma manera, Ciabatti recuerda la importancia del accidente del campeón italiano en Barcelona, que rozó la tragedia cuando fue atropellado por la KTM de Brad Binder: “Eso cambió el guión de la temporada. Un accidente así te afecta a nivel personal y psicológico”.

Bagnaia ha salido del bache cuando más lo necesitaba y coincidiendo con los primeros fallos de Martín esta temporada. “Ahora han igualado fuerzas para esta recta final, y será muy emocionante”, constata Checa. Las sprint del sábado han sido la mejor baza del madrileño, que acumula siete triunfos en la modalidad estrenada este año además de tres victorias los domingos. El turinés, en cambio, siempre va de menos a más los fines de semana y acostumbra a extraer el máximo de las carreras largas, donde ya acumula seis victorias. El número uno ha ganado también cuatro sprints, y su mayor lastre han sido los cinco ceros en domingo.

Ahora quedan cuatro finales, y la clave será minimizar errores. “Esto una carrera de aciertos. Lo que no pueden permitirse es salir a no perder. Siempre hay que salir a ganar, y hablo pensando en el Mundial. Eso, a lo mejor, implica saber que tu límite un día es ser cuarto”, comenta Checa. “Va a primar la regularidad”, concuerda Aspar. En Ducati, como fábrica, observan la lucha encantados, y sacan pecho porque saben que al final será un piloto suyo el que gane el Mundial. “Hay tres pilotos Ducati en las tres primeras posiciones. Si pensamos dónde estábamos hace unos años, esto es una maravilla. Para nosotros, lo más importante es que Pecco, Jorge y Marco [Bezzecchi] son pilotos que se respetan. Hacen lo que sea para ganar, pero nunca algo incorrecto o antideportivo. Nosotros queremos eso, que gane el mejor con la imagen que Ducati quiere proyectar a través del campeonato” concluye Ciabatti.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Tu comentario se publicará con nombre y apellido
Normas

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_