El Teatro Real redobla su apuesta por la renovación del repertorio de ópera en su próxima temporada
El coliseo madrileño presentará 10 títulos inéditos en su historia, entre ellos el estreno absoluto de una obra de Luis de Pablo y Vicente Molina Foix, una composición híbrida de Rufus Wainwright y nuevas producciones dirigidas por Àlex Ollé, Calixto Bieito o Christopher Alden
El Teatro Real continúa con su apuesta por la renovación del repertorio de ópera y las coproducciones internacionales. A punto de superar la temporada más difícil de su historia por las limitaciones de la pandemia y con el eco aún reciente de la concesión del premio a la mejor compañía del mundo en los prestigiosos International Opera Awards por sus estrenos durante el año 2019, el coliseo madrileño ha presentado este jueves una programación para el próximo curso cargada de novedades, según ha subrayado su director artístico, Joan Matabosch: nada menos que 10 nuevos títulos se incorporarán al repertorio de la institución, entre ellos tres compuestos en el siglo XXI y otros tres en el anterior. Será la temporada número 100 desde su inauguración en 1850 y la 25 desde su reapertura en 1997.
Entre las novedades, Matabosch ha destacado el estreno absoluto de El abrecartas, con música de Luis de Pablo y libreto de Vicente Molina Foix basado en la primera parte de la novela del mismo título que le valió al escritor el Premio Nacional de Narrativa en 2007. Por él desfilan figuras capitales de la literatura española de la primera mitad del siglo XX, como Federico García Lorca, Vicente Aleixandre, Miguel Hernández o Eugenio D’Ors, convertidos en personajes que cuentan su historia íntima a través de cartas y, de paso, la convulsa historia de España en esos años. La dirección musical correrá a cargo de Fabián Panisello y la puesta en escena llevará la firma de Xavier Albertí, que se embarcará en este proyecto tras concluir el próximo julio su mandato como director del Teatre Nacional de Catalunya. A lo largo del curso se estrenarán además otras dos nuevas producciones: la primera versión escénica de Las horas vacías, de Ricardo Llorca, con puesta en escena de José Luis Arellano García, y una rompedora escenificación de dos misas de Joan Cererols dirigida por la compañía teatral catalana Agrupación Señor Serrano.
Matabosch ha destacado además otras dos producciones propias de títulos nunca antes estrenados en el Teatro Real. La primera será El ángel de fuego, de Prokófiev, puesta en pie en colaboración con la Ópera de Zúrich, donde ya se vio en 2017, con una impactante puesta en escena de Calixto Bieito ambientada en los años cincuenta y el debut en la casa del español Gustavo Gimeno. Y en junio se estrenará Juana de Arco en la hoguera, de Honegger, con otro debut importante en el foso, el del ascendente director español Juanjo Mena, y Àlex Ollé (codirector de La Fura dels Baus) como responsable de la puesta en escena, en una coproducción con la Ópera de Frankfurt que incorpora como prólogo La damoiselle élue, de Debussy.
Otro título que se incorporará al repertorio del coliseo madrileño es Parténope, de Händel, en la emblemática coproducción de la English National Opera y la Ópera de Australia dirigida por Christopher Alden, repuesta varias veces desde su exitoso estreno en Londres en 2008. Se escucharán también por primera vez en el Teatro Real El rey Arturo, de Purcell, en versión de concierto dramatizada dirigida por Lionel Meuner; Siberia, de Giordano, también en versión de concierto protagonizada por Sonya Yoncheva, y Hadrian, un híbrido que Matabosch ha definido como “belcantismo pop” compuesto por el conocido cantante canadiense Rufus Wainwright, que se ofrecerá en una versión de concierto semiescenificada por Jorn Weisbrodt apoyada en imágenes de Robert Mapplethorpe.
Las novedades se alternarán con títulos populares. Nabucco, de Verdi, vuelve al escenario del Teatro Real después de 151 años ausente, algo que Matabosch ha calificado de “sorprendente”: “Es rarísimo que una de las óperas más populares de Verdi no se haya visto en tanto tiempo. Por tanto, podríamos sumar también este estreno a las novedades de la temporada”. El director artístico del coliseo ha subrayado además la calidad de este montaje, que es una producción del Real con la Ópera de Zúrich, donde ya se presentó en 2019, con dirección musical de Nicola Luisoti y una puesta en escena suntuosa dirigida por Andreas Homoki.
Dentro del repertorio clásico se verán también Le nozze di Figaro, de Mozart; La Cenerentola, de Rossini; La Bohème, de Puccini, y El ocaso de los dioses, cuarta y última jornada de El anillo del nibelungo, con la que el Real cierra su macroproyecto de estrenar durante cuatro temporadas consecutivas la tetralogía wagneriana completa, de nuevo con puesta en escena de Robert Carsen y dirección musical de Pablo Heras-Casado.
Habrá también seis conciertos vocales protagonizados por grandes voces internacionales: Lise Davidsen, Lisette Oropesa, Anna Netrebko, Juan Diego Flórez, Yusif Eyvazof, Bejun Mehta y Jakub Jozef Orlinski.
La temporada se inaugurará el 20 de septiembre con La Cenerentola. Según Ignacio García-Belenguer, director general del Teatro Real, los protocolos anticovid se mantendrán activos, aunque se espera que a lo largo del año que viene se pueda recuperar la venta del aforo completo del teatro.
Tres platos fuertes de danza
El menú de danza diseñado por el Teatro Real para la próxima temporada se compone de tres platos fuertes. El Ballet Nacional de España presentará su espectáculo homenaje a Antonio Ruiz Soler, estrenado el pasado abril con ocasión del centenario de su nacimiento, compuesto por coreografías de esta mítica figura de la danza española junto a otras de Rubén Olmo, actual director del BNE, y Carlos Vilán. El segundo plato lo ofrecerá la compañía de Carlos Acosta con un programa que rinde homenaje a la Cuba natal del bailarín a través de la mirada de destacados coreógrafos contemporáneos, como Sidi Larbi Cherkaoui y Russell Maliphant. El postre lo servirá el legendario Ballet Bolshói con el clásico 'La bayadera', en la versión de Yuri Grigorovich sobre el original de Marius Petipá.
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