Bad Bunny convence a sectores del feminismo con el vídeo de ‘Ella perrea sola’

“Que ningún baboso se le pegue./ La disco se prende cuando ella llegue./ A los hombres los tiene de hobby”, rezan los versos de Ella perrea sola, la nueva canción de Benito Martínez Ocasio (Puerto Rico, 1994). Conocido como Bad Bunny, el rapero, trapero y reguetonero puertorriqueño de 26 años ha conseguido situar cada nuevo movimiento que hace en el centro del debate en torno a la música urbana.

En el poderoso vídeo que acompaña la canción, Bad Bunny se hace mujer y hombre, y reivindica otro tipo de masculinidades, que se escapan de la imagen tradicional. Así, con dos enormes pechos encajados en el torso, un cambio de vestuario propio de una diva del pop, taconazos y una larga melena, el músico, con la mirada subrayada por larguísimas pestañas postizas, perrea con su yo hombre, embutido en un traje rosa. Perrean hasta las flores, convertidas en figuras antropomorfas que sacuden sus cuerpos al ritmo de la música.

La popularidad de Bad Bunny ha provocado incluso reacciones políticas, como la de la feminista y ex diputada de Más Madrid en la Asamblea de Madrid Clara Serra. En su cuenta de Twitter, Serra aplaude la canción: “¿Por qué es importante el vídeo de Bad Bunny? Porque habla de tías que se lo pasan bien solas y defiende, desde una música asociada a la masculinidad hegemónica y a la cultura machista, el derecho de las mujeres a perrear sin aguantar a babosos”. A partir de aquí enumera hasta siete aspectos positivos de la canción, como: “Ofrece a los jóvenes de hoy un marco sobre el que poder repensar qué significa ser hombre’”.

El cantante cierra el videoclip con un rótulo en rojo que reclama: “Si no quiere bailar contigo, respeta, ella perrea sola”. La canción, publicada el pasado viernes, ha conseguido situarse como la número dos en tendencias de YouTube -superando los 38 millones de visualizaciones-, llegando a alcanzar el octavo puesto en las más escuchadas en las listas de Spotify de España, y el 25 a nivel global. En 72 horas.