_
_
_
_
_
ALEXIS SÁNCHEZ
Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Alexis Sánchez: el goleador en el limbo

Sin club, sin pretemporada, sin fútbol y sin tranquilidad. A menos de tres semanas del primer partido clasificatorio ante Uruguay, ¿debería Alexis Sánchez ser titular en Montevideo?

Alexis Sánchez
Alexis Sanchez durante un partido en 2023.Christian Liewig - Corbis (Getty Images)

Faltan menos de 20 días para el inicio del proceso clasificatorio para el Mundial del 2026 y la situación de Alexis Sánchez preocupa a la selección chilena.

El tocopillano no es sólo el goleador histórico de La Roja, sino que fue el más destacado futbolista chileno en la temporada pasada. Con 18 goles anotados en el Olympique de Marsella y un marcado protagonismo en el segundo lugar obtenido en la Ligue One, hoy no juega, no entrena y no tiene claro su futuro, lo que abre una interrogante válida: ¿debe ser titular en el partido frente a Uruguay el próximo 8 de septiembre en Montevideo?

Alexis completó dos meses sin jugar y es uno de los pocos jugadores de primer orden que no ha realizado pretemporada. Sus exigencias en orden a jugar en un equipo “que dispute cosas importantes” y que tenga protagonismo en la Champions League, la competencia más relevante en Europa, ha complicado una búsqueda que su representante, el poderoso Fernando Felicevich, hace con el mejor de los escenarios: tiene la carta del jugador en su poder.

Con esa ventaja, Sánchez pudo haber optado por permanecer en Marsella, pero las altas pretensiones económicas para un jugador que en diciembre cumplirá 35 años le cerraron las puertas de un club donde ejerció liderazgo y encantó a la hinchada. Se especuló que podría volver a Barcelona, pero los catalanes no lo quisieron por su edad. Y en el Inter de Milán, otros de los clubes donde estuvo, las relaciones no quedaron óptimas precisamente por las demandas económicas del jugador.

En ese escenario, con el hermetismo propio de las negociaciones restando dos semanas para el cierre del mercado en Europa, las opciones son escasas. El fútbol turco o algún club de segundo orden significarían que las condiciones intransables que colocó el mismo Sánchez como pie de negociación deberían ser olvidadas. Por eso en los últimos días no se descartó la posibilidad de fichar en Brasil, el cementerio de los elefantes de los cracks que retornan desde Europa con una rutilante carta de presentación. El goleador levantó títulos en Chile, Argentina, Italia, Inglaterra y España, además de ser artífice y figura en las dos Copas América ganadas frente a la Argentina de Messi.

Independientemente del futuro futbolístico del jugador lo que inquieta es su nivel para afrontar las clasificatorias. Sin entrenamiento ni ritmo competitivo, la duda razonable de Eduardo Berizzo es si Alexis tendrá la camiseta reservada para los duelos ante Uruguay y Colombia que abren las fechas clasificatorias. La presencia de Bielsa en la banca charrúa y el gran nivel de varios jugadores cafeteros que militan en clubes europeos no permiten miran con optimismo el panorama, donde Sánchez –que va por sus quinto camino a una Copa del Mundo, los dos últimos fracasados– siempre es fundamental.

Rumbo a Rusia 2018, Chile fue goleado como local ante Paraguay, en una noche que fue desastrosa para la generación dorada, por entonces en su mejor nivel. Aún se recuerda que Alexis, en vía de definir contrato en la Premier League, dudaba entre aceptar las ofertas del Manchester United o el City. Tras la derrota, en un vestuario herido y al borde del conflicto, el tocopillano escapó de los reproches y lamentos para zambullirse en el celular en busca de las respuestas ante su incierto futuro laboral.

Acostumbrado a imponer sus condiciones y a gozar de su enorme talento, para el niño maravilla lo que vive hoy es un contraste. Y, al mismo tiempo, una prueba crucial sobre los últimos años de su carrera. De clasificar a la Copa del Mundo lo haría con 37 años y la misma obsesión de siempre por mantenerse físicamente. Muchos especialistas aún le reprochan el sobre entrenamiento. Pero a estas alturas, su presente lo dicta la inactividad y la inquietud por definir un futuro que no viene fácil, porque está en un lugar que las estrellas siempre odian. El limbo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_