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Diálogo con el pasado de tres generaciones de realistas en el Thyssen de Málaga

Una nueva exposición repasa el último medio siglo de realismo español y juega al engaño visual

Un hombre camina junto a la obra 'Nevera nueva', de Antonio López.
Un hombre camina junto a la obra 'Nevera nueva', de Antonio López. Daniel Pérez (EFE)

En el bodegón de Manuel Franquelo incluido en la nueva exposición temporal del Museo Carmen Thyssen de Málaga (Sin título, 1991), una balda sujeta varios objetos, entre ellos, una cinta roja que provoca en el espectador la reacción inmediata de querer soplarla o echarle mano. Es la idea del trampantojo, un engaño visual que arranca la necesidad de palpar la obra y que se alcanza con colores, tonos y texturas muy precisos. Esa intención de trascender la realidad es uno de los hilos conductores de la nueva propuesta de la pinacoteca malagueña, que repasa el último medio siglo de realismo español a través de la creación de pintores de tres generaciones consecutivas.

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La principal característica del montaje La apariencia de lo real. Cincuenta años de arte realista en España (1960-2010), que se puede visitar desde mañana jueves hasta el próximo 10 de septiembre, es el diálogo de estos autores contemporáneos con el arte holandés del siglo XVII, el naturalismo barroco español y el realismo del siglo XIX. “Es una exposición compleja, muy meditada, que al mismo tiempo permite conocer cómo es la pervivencia de ciertos géneros en nuestra tradición española”, ha subrayado la directora artística del Thyssen de Málaga, Lourdes Moreno, durante la presentación de la muestra, que está patrocinada por la Fundación Unicaja.

Los artistas representados nacieron en la década de los treinta del siglo pasado, como Antonio López, Isabel Quintanilla, Amalia Avia, Francisco y Julio López Hernández, María Moreno o el chileno Claudio Bravo; en la de los cuarenta, como Eduardo Naranjo y Cristóbal Toral; o en los años cincuenta, entre los que están Gerardo Pita, César Galicia o el propio Franquelo. La primera generación es quizás la más conocida y reconocida y “abrió el camino en tiempos en los que en España y en corrientes internacionales primaba el informalismo y la abstracción”, ha recordado Moreno, comisaria de la muestra.

La exposición está formada por 54 pinturas, esculturas y dibujos de 22 autores actuales y 10 maestros del pasado, incluido Francisco de Zurbarán, que abre la sección cuyo título, Naturalezas vivas, juega con el nombre de los bodegones. Frente a una gama cromática más oscura en el pasado, como ocurre con Zurbarán o Miguel de Pret, los pintores actuales se decantan por colores más claros y llenos de luz, caso de Isabel Quintanilla y Antonio López, que con nueve piezas es el autor más presente en el montaje.

'Sin título', 1991, de Manuel Franquelo.
'Sin título', 1991, de Manuel Franquelo.
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El uso del formato bidimensional para intentar presentar al público un objeto tridimensional está presente también en el apartado Realidad figurada, con trampantojos como Huyendo de la crítica (Pere Borrell, 1874), en el que un niño parece querer salir del cuadro. En esta sección dedicada a la figura humana destacan el desnudo Vanesa (2001-2002), en el que Eduardo Naranjo cultiva la tradición de las majas, y el hiperrealista El boxeador (César Galicia, 1988), que parece una fotografía, no una pintura.

La sección Luces interiores se recrea en perspectivas del espacio cotidiano, de la vida doméstica, y A pleno sol exhibe varios ejemplos de cómo los realistas contemporáneos han incorporado los paisajes y las panorámicas urbanas, muy poco frecuentes en la tradición española y género renovado especialmente por Antonio López y sus visiones de Madrid. En este apartado también hay varias obras de Gerardo Pita.

Además de prestadores particulares y de la colección de la baronesa Carmen Thyssen, que ha asistido a la presentación de la muestra junto al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, las obras proceden del Museo del Prado, del Thyssen-Bornemisza, del Reina Sofía, del Museo de Arte Contemporáneo de Madrid y del Museu Nacional d’Art de Catalunya.

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