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Lydia Delgado expone su faceta de artista plástica

La diseñadora de moda exhibe sus irónicas y desenfadadas 'Iconic girls'

Uno de los dibujos que expone y vende la diseñadora de moda Lydia Delgado.
Uno de los dibujos que expone y vende la diseñadora de moda Lydia Delgado.

“Dibujar me permite ser libre. Me divierte y saca mi energía más positiva”. Lo afirma Lydia Delgado, la conocida diseñadora de moda, que presenta su faceta de artista plástica en una exposición organizada por Lorena Ruiz de Villa Contemporary Art, hasta finales de diciembre. La muestra, titulada Iconic girls, despliega una tropa de mujeres apenas esbozadas pero curiosamente llenas de detalles. Elegantes, esbeltas, flexibles y sin edad definida, las chicas icónicas de Delgado evocan aquellas mujeres llenas de charme de las estampas parisinas años 50 y sin embargo a una mirada más atenta sus atuendos remiten a épocas y situaciones muy diversas. Las hay con pantalones setenteros y prendas de exóticas princesas, con faldas inocentes y vestidos de noche ajustados y melena a lo Rita Hayworth, pero todas se caracterizan por un aire irónico, que trasmite humor y positividad.

“No son bocetos ni dibujos preparatorios, no tienen nada que ver con la ropa que hago, de hecho, ninguno de estos dibujos se ha convertido en una prenda real. Surgen de un estado casi onírico, de un relato que se forma en mi cabeza como una fantasía que aflora del subconsciente”, explica Delgado que está trabajando en un proyecto de realidad virtual junto con su hija Miranda Makaroff, con la que ya ha colaborado en una colección de moda.

Delgado realiza sus chicas con trazos de lápiz y gouaches muy diluido sobre papel (entre 900 y 1350 euros enmarcados). Los primeros son más picasianos y minimalistas, pero con el tiempo la figura humana se ha ido enriqueciendo de detalles, sobre todo joyas, pendientes y pulseras de tamaño exagerado. Ya más recientemente han aparecido fondos de colores vivos y originales piezas de mobiliario. “Con la ropa no me salen las ideas dibujando, el punto de partida suele ser el material y el color. En cambio cuando dibujo voy tan suelta y sin presión que me salen cosas sin pensarlo siquiera, como los muebles. Puede que un día empiece a dibujar animalitos, hombres no creo”, asegura la diseñadora, que nunca ha realizado prendas para hombres, excluyendo alguna incursión en la ropa de deporte.

“La obra plástica de Lydia influye en su ropa, más que al revés, pero ambas se van retroalimentando. Es inevitable. Cuando Miuccia Prada empezó a formar su colección, comprar obras le hizo cambiar toda su visión del negocio de la moda”, indica Lorena Ruiz de Villa, un personaje bastante atípico en el panorama barcelonés. Pese a formar parte del gremio de galerías y poseer un amplio espacio en Sarrià, organiza contadas exposiciones, todas muy especiales. Su principal actividad es la asesoría especializada en arte español e internacional de los siglos XX y XXI, que la lleva a viajar incansablemente visitando ferias y estudios de artistas, donde adquiere las obras para sus clientes, no sólo coleccionistas privados, sino también empresas y fundaciones que quieren crear su propia colección.

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