Boamistura redecora el Barrio de las Letras
El equipo creativo vuelve a pintar el grafiti 'Ama lo que haces' que se encontraba en mal estado
Es un corazón formado por otros elementos: una cabeza, que representa la inteligencia, un pájaro, símbolo de libertad, un árbol que remite a la fuerza de la vida. Diego, Pablo y Javier, del grupo Boamistura, han recuperado el grafiti de la calle Huertas, que desde hace un tiempo se encontraba en mal estado. “Lo pintamos en 2012, cuando España se encontraba en una grave situación de crisis económica”, cuenta Pablo Purón, de 32 años y miembro de Boamistura desde que el grupo empezó su carrera en Alameda de Osuna en 2001. “Si ves, al centro está un diamante”, añade, “fue nuestro mensaje de optimismo en aquella época”.
El barrio se ha despertado la mañana del miércoles con el desconcierto de una pared blanca, en lugar del grafiti que con el tiempo había sido cubierto por pegatinas, otras pinturas y carteles. Los tres jóvenes del grupo habían limpiado la pared el día anterior para volver a darle vida. El trío acaba de volver de Colombia, donde ha desarrollado un proyecto en Buenaventura y ha participado a la Bienal de Muralismo en Cali. “No solemos recuperar nuestros murales”, cuenta Javier Serrano, “pero esto tenía un significado particular”, añade al detallar que fue uno de los primeros que pintaron en el centro de la ciudad.
El grafiti se encuentra en la pared que obstruye la entrada a una tienda cerrada hace tiempo. “A mí me encanta”, cuenta Fernando Aponte, vecino del barrio que suele comer en el restaurante aledaño, “Lástima que puede que aguante solo unos meses”. Aponte es ingeniero y relata haber participado en la reforma del inmueble número 10 de la calle. “Puede que en unos meses, vuelvan a abrir una tienda allí”. “Es lo que tiene trabajar en la calle”, añade Pablo Purón al relatar que a lo largo de la mañana vecinos y turistas se han parado a hablar con ellos. “Si quisiéramos estar solos, no estaríamos aquí”, añade con una sonrisa.
Boamistura, conocido también por los proyectos participativos llevados al cabo en las chabolas de Rio de Janeiro en Brasil, o en los barrios marginales de medio Latinoamérica, ha llegado a tener nueve integrantes. Si se vuelve a abrir una tienda, el mural irá perdido. Los ladrillos que conforman la pared no permiten que se despegue de ninguna forma, según explica Javier. “Nos conformamos con que aguante unos meses más”, añade Pablo, “nos hemos acostumbrado a la crisis y las dificultades, pero este mensaje de hace cuatro años creo siga siendo importante. Nos ha ido bien, y queremos contarlo” concluye. Después de unas horas el grafiti empieza a recobrar a su forma inicial. A primera hora de la tarde casi solo le falta volver a lucir la frase que llevaba:“Love what you do [Ama lo que haces]”.
