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El Gobierno regional reivindica la función de las diputaciones provinciales

Siete pueblos madrileños se unieron en un 'macromunicipio' en 2015 para ofrecer mayores servicios a sus vecinos

De izquierda a derecha: Joaquín Vidal, director de Estrella Digital, Borja Gutiérrez, el viceconsejero Miguel Ángel Ruiz y César Muñoz.
De izquierda a derecha: Joaquín Vidal, director de Estrella Digital, Borja Gutiérrez, el viceconsejero Miguel Ángel Ruiz y César Muñoz.Iker Aizpuru

El viceconsejero de Medio Ambiente, Administración Local y Ordenación del Territorio, Miguel Ángel Ruiz (PP), ha reivindicado este lunes la función de las diputaciones provinciales, cuyo papel considera "importante e imprescindible" para los municipios pequeños. Ha explicado que, a pesar de que Madrid es una comunidad uniprovincial, las diferentes direcciones generales cumplen las funciones de la diputación, una entidad supramunicipal que PSOE y Ciudadanos pretenden eliminar, según el acuerdo de gobierno que cerraron el pasado miércoles. En la misma dirección se han expresado el alcalde de Brunete, Borja Gutiérrez (PP), y el regidor de Villanueva de Perales, el socialista César Muñoz, que consideró a estas instituciones “una necesidad”, independientemente de la estructura administrativa que adopten. Ambos Ayuntamientos forman parte de un macromunicipio conformado por siete Consistorios en 2015 para ofrecer mayores servicios a sus vecinos.

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Los tres participaban en un desayuno informativo organizado por Estrella Digital en el que se analizaba la constitución de un macromunicipio, el que han formado siete pequeños pueblos del oeste de la Comunidad. En opinión de los invitados, este tipo de fusiones genera empleo, movimiento económico a pequeña escala y mejora el rendimiento de las infraestructuras de estos municipios. “Lo único que hemos hecho ha sido mandar el mensaje a la ciudadanía de que pasar al pueblo de al lado no supone un socavón en tu día a día”, ha explicado Borja Gutiérrez, alcalde de Brunete.

Los alcaldes de Brunete, Sevilla la Nueva, Quijorna, Villanueva de Perales, Villamantilla, Valdemorillo y Navalagamella firmaron en septiembre de 2015 un convenio que permitiría a todos sus vecinos utilizar las instalaciones deportivas y culturales a precio de empadronado, independientemente de la localidad en la que vivan. El objetivo a más largo plazo es que estos municipios integren también servicios administrativos y policiales, así como también un intercambio de funcionarios o inversiones. Siguen la máxima de que la unión hace la fuerza.

Para estos municipios, que en total no llegan a los 40.000 habitantes (el más grande es Valdemorillo, con apenas 12.000 vecinos), es "fundamental un buen sistema de financiación local", ha confirmado Cesar Muñoz, alcalde de Villanueva de Perales. “La Comunidad no puede hacer otra cosa que apoyar sin duda esta propuesta y contribuir a que los municipios con dotaciones a bajo rendimiento puedan ponerlas al servicio de los vecinos de otros municipios”, ha subrayado el viceconsejero.

Signo político dispar

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El proyecto, como han explicado ambos alcaldes presentes en la reunión, persigue evitar que “dupliquemos infraestructuras por el único hecho de tratar de equipararnos al vecino de al lado”. Los siete pueblos, de signo político dispar, conforman un radio de 100 kilómetros cuadrados, una cercanía que ayuda a la prestación conjunta de servicios. “Los partidos políticos con un denominador común de bienestar ciudadanos se pueden entender”, han coincidido los responsables municipales. Los regidores también han recordado que todas las fuerzas del arco político han votado favorablemente al proyecto en sus plenos municipales.

En opinión de los alcaldes, en cuanto el proyecto esté “asentado”, se intentará poner solución a la movilidad de los vecinos entre las distintas localidades. Así lo ha recalcado el viceconsejero, Miguel Ángel Ruiz: ”Si los municipios necesitaran un flujo de viajeros estoy convencido de que el Consorcio Regional de Transportes estará a la altura de las circunstancias y pondrán una movilidad mayor”.

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