Aniversario con Händel

Acertó de lleno Josep Vila i Casañas al elegir una obra de gran lucimiento coral -el oratorio Israel en Egipto, de Georg Friedrich Händel- para festejar las bodas de plata del Cor de Cambra del Palau de la Música Catalana. La formación, creada en 1990 y dirigida durante sus primeros 21 años por Jordi Casas, atraviesa un buen momento artístico -con Josep Vila como titular ha conseguido notables éxitos en Viena, Londres y París- y el próximo mes de julio afrontará junto al Orfeó Catalá una nueva etapa bajo la dirección de Simon Halsey, que compaginará este cargo con la titularidad del coro de la Orquesta Sinfónica de Londres.

El futuro tiene, pues, acento británico, y nada mejor que celebrar estos tiempos de renovación tranquila con Händel, que reinó en Londres con sus grandes oratorios, óperas y conciertos. Estrenado en 1736, en el King´s Theater, Israel en Egipto desconcertó a un público que esperaba muchas arias de estremecedor virtuosismo para lucimiento de los solistas vocales y en su lugar se encontró con el protagonismo soberano del coro.

De las tres partes del oratorio, Händel sólo conservó intactas los dos últimas- Éxodo y La canción de Moisés- centrando su talento expresivo y dramático en la descripción de las plagas de Egipto, la marcha de los israelitas atravesando el Mar Rojo y el funesto final pasado por agua que liquidó al ejército del faraón. Hay, por tanto, mucha tela que cortar por parte de coro que debe poner gran variedad de acentos y matices al servicio de la elocuente narración handeliana.

No desaprovecharon esa riqueza coral las voces del Cor de Cambra del Palau; brilló la calidad vocal y la excelente preparación musical de la plantilla, en la que seis cantantes -la soprano Maria Pujades, el contratenor Toni Gubau, la contralto Ariane Prüssner, el tenor Carles Prat y los barítonos German de la Riva y Daniel Morales- dieron prestancia a los recitativos y arias del oratorio.

A la inspirada dirección de Vila, flexible y hábil en el pulso narrativo, respondieron con entusiasmo tanto el coro como Vespres d´Arnadí, excelente formación historicista liderada por el clavecinista y organista Dani Espasa, solista en los fragmentos del concierto de órgano HWV 295 que, siguiendo la práctica barroca, complementó el oratorio. La fiesta se cerró con Josep Vila y Jordi Casas compartiendo juntos en el escenario del Palau el éxito de una aventura coral que ya ha cumplido sus primeros 25 años.