Castellón recula y pide a Sanidad un nuevo aparato de radioterapia

El clamor de la comunidad médica y científica, la denuncia de los partidos políticos y las investigaciones de la Fiscalía de Castellón y el Síndic de Greuges han provocado que la Diputación de Castellón recule y admita que el Hospital Provincial necesita un nuevo acelerador lineal para el tratamiento de los pacientes oncológicos por constantes averías en los dos aparatos de radioterapia que obligan a suspender casi todas las semanas la atención a los enfermos. Así lo han comunicado este lunes desde la corporación provincial que, indicaron, han trasladado a la consejería de Sanidad que es “oportuno” dotar al centro de un nuevo aparato.

Este cambio de parecer llegó después de que el Ayuntamiento de Castellón informara a través de un comunicado de la disposición a solucionar el conflicto. “Tanto el presidente de la Diputación, Javier Moliner, como el consejero de Sanidad, Manuel Llombart, han mostrado su compromiso firme de dotar de un nuevo acelerador lineal al Hospital Provincial”, dijo el alcalde, Alfonso Bataller, a través de esta nota. Desde la Diputación aseguraron desconocer este compromiso pero afirmaron que sí se había trasladado al Consell la necesidad de la compra y que había "interés" en realizarla.

A última hora de la tarde, el Hospital Provincial desmentía el compromiso. El centro ha mantenido esta tarde una reunión con la empresa encargada del mantenimiento de los equipos, la cual ha presentado un informe para constatar las “óptimas condiciones” de funcionamiento y los “márgenes de excelencia” de la atención sanitaria. El centro manifestó que tanto la Generalitat como la Diputación (las dos administraciones que gestionan el hospital) “estudian la mejor solución a los aceleradores”. Pero nada de compra, al menos de momento.

Las “óptimas condiciones” en el funcionamiento que alega la empresa chocha con la carta que el propio equipo de Oncología de este hospital remitió el mes pasado a la dirección. En ella denunciaban que las averías no eran puntuales, sino que eran consecuencia de un “déficit estructural” al que no se había puesto ninguna solución. Y esto a pesar de que el Hospital Provincial dispone de un ‘bunker’ para acoger un tercer acelerador lineal prometido en 2010. También el presidente de la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR), José López Torrecilla, criticó los fallos y alertó de la importancia de no interrumpir el tratamiento de radiología a un enfermo de cáncer.

Los fallos en los dos aparatos del centro (los únicos que existen para toda la provincia de Castellón) sumaron 80 paradas en todo el pasado año, tal y como Sanidad reconoció en una respuesta parlamentaria a la diputada de Compromís, Mónica Oltra. Este grupo ha abanderado en la Diputación las denuncias por la merma provocada en este servicio. La crisis por las deficiencias en la radioterapia se agudizó a principios de enero con nuevas averías. El pasado viernes fue una paciente la que denunció a través de Radio Castellón que llegó a sufrir un retraso de cinco días en el tratamiento.

El Defensor del Paciente ha llevado el caso ante la Fiscalía de Castellón y el Síndic de Greuges abrió la semana pasada una investigación al respecto.

La Consejería de Sanidad se comprometió a analizar la situación cuando, en la última reunión interna del consorcio del centro hospitalario, el diputado de Compromís, Enric Nomdedéu, puso sobre la mesa la carta del equipo médico exigiendo medidas. El presidente de la Diputación, Javier Moliner, ha rehusado hasta la fecha exigir públicamente el nuevo acelerador provincia.