La Generalitat autorizará un ‘correbou’ por Sant Jordi

La temporada de correbous en las tierras del Ebro se adelantará y empezará con toda probabilidad este fin de semana en el municipio de Aldover (Baix Ebre). La Generalitat estudia autorizar esta semana la celebración de actos taurinos el 21 y 22 de abril con motivo de Sant Jordi. Aldover ha aportado documentación a la delegación de la Generalitat en las comarcas del Ebro —fotografías y declaraciones juradas de vecinos— para acreditar correbousen estas fechas celebrados hace cincuenta años. La aprobación de los actos taurinos se realizaría, entonces, alegando la tradicionalidad de los festejos.

El de Aldover no es el único caso de autorización extraordinaria de correbous, alegando tradicionalidad o excepcionalidad, admitida durante el último año: desde Sant Joan, en junio, se han aprobado festejos en fechas no habituales en Camarles (Baix Ebre), Ulldecona (Montsià) y Campredó (Baix Ebre).

Hasta ahora, la temporada de correbous solía iniciarse en la localidad de Mas de Barberans (Montsià) entre el 27 y el 30 de abril, con motivo de Sant Marc. El Ayuntamiento de este municipio prevé realizar el 29 de abril “por primera vez en Cataluña”, según reza su programa de fiestas, la modalidad de bous capons.

Durante la temporada pasada, en las comarcas del Ebro hubo 208 días de correbous. Esta cifra es inferior a los realizados en 2010, cuando hubo 212 jornadas de actos taurinos. La crisis económica este año podría reducir aún más la programación.

La localidad asegura que celebró actos taurinos en estas fechas hace 50 años

Tanto peñas taurinas como entidades pro animales están pendientes de la publicación del reglamento que despliegue la ley de los correbous. Según fuentes del Departamento de Interior, el texto “está en su fase final” de redactado. La redacción del reglamento no ha escapado de la polémica entre protaurinos y defensores de los animales. La Generalitat solo incluyó en los primeros borradores las exigencias de los protaurinos, que pedían no fijar ningún límite de tiempo para acreditar la tradicionalidad de estos fastos en un municipio pese a que la ley estipula un máximo de 60 años. Esto abría así la puerta a la multiplicación de los correbous. También especificaba en el caso de los bous embolats la posibilidad de permanecer más de 15 minutos con las astas en llamas, si el veterinario certificaba que el fuego había rebrotado por causas naturales o ajenas a los organizadores.

Tras la polémica, al final el Ejecutivo catalán dio marcha atrás y escuchó también a la entidad animalista AnimaNaturalis, con la que ha mantenido en las últimas semanas varias reuniones en la sede del Departamento de Interior. Aïda Gascón, portavoz de AnimaNaturalis, no sabe, sin embargo, si al final la Generalitat introducirá en el reglamento sus peticiones, entre las que se encuentra retirar los aspectos más polémicos de primer borrador. AnimaNaturalis ha presentado 10 denuncias por presuntas irregularidades en correbous de la temporada pasada. En paralelo, la Generalitat también ha mantenido reuniones con las peñas taurinas.