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Macri y Kirchner se enzarzan en las redes sociales: “No se meta con mi madre”

Los dos expresidentes de Argentina se disputan en Twitter el rédito de la inauguración de un gasoducto demorado durante años

Mauricio Macri y Cristina Kirchner el 10 de diciembre de 2019, en Buenos Aires.
Mauricio Macri y Cristina Kirchner el 10 de diciembre de 2019, en Buenos Aires.Natacha Pisarenko (AP)

La inauguración de un gasoducto de casi 600 kilómetros que atraviesa Argentina de oeste a este ha enfrentado desde hace meses a los dos principales espacios políticos de Argentina. Cristina Kirchner y Mauricio Macri, los dos expresidentes, los dos en las antípodas, ninguno candidato en las elecciones de octubre, se venían disputando el rédito por la obra de infraestructura energética más importante del país en los últimos años. Antes, durante y después de la presentación de la obra, que fue este domingo, los dos lanzaron críticas cruzadas. Entre tuit y tuit, Kirchner introdujo a la madre de Macri en la pelea. “No se meta con mi madre, vicepresidenta, que fue una buena madre”, le respondió Macri. Y hasta ahí cayó el debate.

El domingo, el ministro de Economía y precandidato presidencial Sergio Massa, de Unión por la Patria (la coalición que reúne a las tres principales vertientes del peronismo en el Gobierno), el presidente, Alberto Fernández y su vice, Cristina Kirchner, acudieron a la localidad de Salliqueló, en la provincia de Buenos Aires, para inaugurar la obra. Era 9 de julio, día de la independencia en Argentina, y estaban materializando lo que el peronismo considera un paso “histórico” hacia la recuperación de la soberanía energética.

Cuando habían pasado unas horas del fin del acto, la vicepresidenta lanzó un tuit en el que resumía lo que ya había dicho durante el acto. Kirchner criticaba que durante el Gobierno de su rival político se instalaron “53 kilómetros de gasoductos troncales” que “no tuvieron impacto alguno en el sistema de transporte”, mientras que durante el Gobierno de su esposo (2003-2007) y los dos suyos (2007-2015) “se instalaron 3.211 kilómetros”. “Ahora se entiende por qué su mamá lo castigaba por mentir”, terminaba el mensaje que, sin mencionarlo, se dirigía a Macri.

La vicepresidenta estaba haciendo referencia a una entrevista publicada en 2019 por la revista política Noticias, en la que la madre de Macri, Alicia Blanco Villegas, decía lo siguiente a la periodista Daniela Gian: “Le he llegado a pegar [a Mauricio Macri] por mentir, cosa que me arrepiento, pero no se debía mentir, jamás”.

Macri también había estado lanzado sus críticas antes, durante y después del acto. “El Gobierno anuncia con bombos y platillos un gasoducto que llega tres años tarde y cuya demora le costó a la Argentina más de 5.000 millones de dólares”, había escrito en Twitter el domingo. En el mensaje, también había ironizado con el nombre de la obra, que fue bautizada como el expresidente Néstor Kirchner (“Disculpen si no lo llamo por su nombre oficial”) y, al final, hacía una concesión: “Ahora por lo menos tenemos algo concreto. Aprovechémoslo”.

La chicana de la vicepresidenta lo sacó de nuevo al ring: “Me acusa de no haber construido gasoductos. ¿Para qué iba a hacerlo, si nos había dejado sin gas para transportar? Su Gobierno y el de su marido fueron desastrosos en energía, los peores de la historia: cayó la producción casi todos los años, multiplicaron las importaciones y los subsidios”. Al final, defendía a su madre: “Y no se meta con mi madre, vicepresidenta, que fue una buena madre”.

En el centro de la pelea, está el debate sobre quién se apunta el tanto por una obra que, según el oficialismo, permitirá ahorrar más de 4.200 millones de dólares al año en importaciones de gas –aunque también ha recibido crítica de algunos sectores de la población por las consecuencias ambientales y sociales de seguir un modelo extractivista–.

En julio de 2019, Mauricio Macri, de la alianza de derecha Cambiemos, firmó un decreto de necesidad y urgencia para que la Secretaría de Energía licitara la construcción de un gasoducto que uniera la localidad de Tratayén, en Neuquén, y la localidad de Salliqueló, donde este domingo se inauguró el primer tramo de la obra. El objetivo era trasladar un porcentaje del gas obtenido del yacimiento de Vaca Muerta por el territorio.

La licitación se convocó, pero la fecha de apertura de las ofertas se prorrogó tres veces –dos durante la gestión de Cambiemos–, hasta finales de diciembre de 2020. Antes de que cumpliera el plazo de la última prórroga, el llamado a licitación fue derogado por el Gobierno de Alberto Fernández.

En febrero de 2022, el Gobierno declaró de interés público la construcción del gasoducto y dio la concesión a la empresa estatal Energía Argentina. Durante las licitaciones para la compra de materiales surgió también una polémica dentro del Gobierno, entre los sectores que lideran Alberto Fernández y Cristina Kirchner, que se saldó con la renuncia del ministro de Producción, Matías Kulfas. Tras varios meses, el gasoducto finalmente se inauguró. Y la inauguración, para ambos espacios políticos, se convirtió en acto de campaña.

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