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Fito Páez celebra 30 años del ‘Amor después del amor’

El músico argentino arranca en Buenos Aires la gira de homenaje al disco más vendido de la historia de Argentina

Fito Páez en el primer recital de su gira '30 años del Amor después del amor' en el Movistar Arena de Buenos Aires.
Fito Páez en el primer recital de su gira '30 años del Amor después del amor' en el Movistar Arena de Buenos Aires.LUIS ROBAYO (AFP)

Nadie puede

Y nadie debe

Vivir, vivir sin amor

Fito Páez canta el estribillo de El amor después del amor a coro con el público emocionado del Movistar Arena de Buenos Aires. La canción que abre el disco homónimo, el más vendido de la historia en Argentina, ha formado parte de la banda sonora de varias generaciones a lo largo de las últimas tres décadas. Entre los 15.000 asistentes hay quienes asistieron en 1992 a las primeras presentaciones de su séptimo álbum de estudio, el que lo catapultó al estrellato del rock argentino, y otros que lo ven en vivo ahora por primera vez. Páez brinda ocho conciertos en Buenos Aires con entradas agotadas. Es el arranque de una gira internacional con escalas en Estados Unidos, Venezuela, España, Chile y Uruguay, dedicada a conmemorar un disco que celebra el amor.

Páez canta por orden las 14 canciones que integran El amor después del amor. Es parte del homenaje nostálgico a una época en la que los discos se concebían como un todo, con principio y fin. Hay nuevos arreglos y otras voces, pero bastan los primeros acordes de los temas para que la memoria del auditorio se encienda y arranque a bailar, cantar y aplaudir.

Tenía 29 años cuando el álbum salió a la luz. Llevaba el pelo largo y su aspecto escuálido y desgarbado contribuyó a que muchos argentinos se sorprendiesen cuando conquistó el corazón de la actriz Cecilia Roth, en una de las cimas de su carrera cinematográfica tras el éxito cosechado con el español Pedro Almodóvar. Varias de las canciones fueron inspiradas por ese romance incipiente. Otras nacieron de las brasas de los seis años de la relación que había terminado con la música Fabiana Cantilo. Ambas mujeres, claves en la vida de Páez, participaron en el primero de los recitales, celebrado el pasado 21 de septiembre.

“¿Cecilia está por ahí?”, preguntó el músico ese día con la mirada puesta en la primera fila. Cuando la encontró, se acercó para recordarle frente al micrófono: “Caetano hizo una versión de Un vestido y un amor y nos invitó... ¿Vos te acordás? Nos sentamos allí y él te lo cantó a los ojos... y casi me muero de los celos. Entonces esta vez te lo voy a cantar... No sé si a los ojos, porque estoy medio torcido, pero esto es totalmente para vos...”, dijo antes de arrancar a cantar el séptimo tema, cuyo origen, según la versión del músico, es un pedido de disculpas tras una noche de fiesta. Al regresar a casa de madrugada, la actriz le dijo que se marchase y se encerró en el baño para darse una ducha. En vez de dirigirse hacia la puerta, él se sentó al piano y compuso esa canción en homenaje al día que se conocieron, cuando ella estaba casada. Estuvieron nueve años en pareja y tuvieron un hijo en común, Martín.

“Cuando el tiempo está de tu lado y suma pasado y futuro, no hay más para pedirle a la vida”, escribió Roth en sus redes sociales al día siguiente, junto a un vídeo en el que se la ve al borde de las lágrimas en el concierto. “Nunca dejé de amar a Fito”, contó en una entrevista radiofónica al día siguiente, en la que habló sobre la transformación del vínculo tras el divorcio, en 2001.

“Fabi, tenemos tantas canciones… pero esta es una de las más lindas”, dice Páez en la noche de su cuarto recital en Buenos Aires con palabras dirigidas a Fabiana Cantilo. A continuación, comienza a cantar Creo:

Creo que aún tal vez piensas en mí

Creo poder captarlo

Creo que al fin nada tiene fin

Creo desesperado

Cantilo sube después al escenario para cantar junto a Páez. Entre las cuatro canciones que comparten está Brillante sobre el mic, otra de las composiciones inspiradas por ella, que el público acompaña con las linternas de los teléfonos celulares.

El músico rosarino homenajea también a algunos de los colegas que colaboraron con él en el resultado final del Amor después del amor. Las palabras más sentidas son para Luis Alberto Spinetta, fallecido en 2012, y con quien Páez grabó en 1986 el disco La la la. “Siempre que tocamos Pétalo de sal nos acordamos de Luis Alberto. Cómo lo extrañamos, cómo lo extraña la música argentina, del mundo…”, señaló al detallar que le debe a él “la belleza exótica” del inicio y el final de esa canción.

“Difícil, irremplazable Mercedes [ Sosa]”, se escucha decir a una pareja cuando arranca Detrás del muro de los lamentos, en referencia a la versión original, que cantaba junto a la célebre folclorista, fallecida en 2009. Sin embargo, aprueban poco después cuando los coros los hace Emme.

Tras el cierre entusiasta de A rodar mi vida y un breve intervalo, el viaje musical de la segunda parte transcurre entre otros grandes éxitos grabados en la memoria popular argentina, como Yo vengo a ofrecer mi corazón, Circo Beat o Ciudad de pobres corazones, el broche final antes de los bises.

“Lo re disfruté. Me emocioné con el tema de La Verónica, que es el tema que más me gusta”, dice el músico correntino Félix Maia a la salida del concierto. “El disco salió en el 92, yo tenía cinco años, pero a los 11 o 12, me juntaba en la casa de un compañerito que se había comprado el cassette. Ya estaba empezando a tocar el bajo, así que cuando escuché ese tema en particular me mató, no podía creer lo hermoso”, asegura.

“Fue muchísimo mejor de lo que esperaba. Me emocioné varias veces, sin pensar mucho, supongo que es porque son canciones que sonaban a mis 16, 17 años toooodo el tiempo, y luego durante décadas”, le cuenta uno de los asistentes a otro. “Dos horas de emoción y nostalgia”, sentencia otra.

El amor es lo único que me interesa. Si me das a elegir un tema para charlar escogería el amor”, respondía a EL PAÍS Páez en una entrevista realizada en medio de la pandemia. A sus 59 años, la estrella argentina, en pareja con la actriz Eugenia Kolodziej, se ve radiante. Se prepara para salir de gira por distintas ciudades de argentina y del extranjero, pero también para promocionar la serie sobre su vida producida por Netflix, El amor después del amor. “30 años de la vida del músico, atravesada por la genialidad y la tragedia, éxitos, fracasos, excesos, amores y canciones”, promociona la plataforma. Los 30 años que estos días Páez homenajea desde lo alto del escenario.

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