El nivel de actividad del Nevado del Ruiz baja de naranja a amarillo

El Servicio Geológico Colombiano (SGC) ha anunciado este martes que el nivel de actividad del volcán Nevado del Ruiz ha pasado de naranja, en el que se encontraba desde el 30 de marzo pasado, a amarillo. Eso significa que la posibilidad de que entre en erupción en un plazo de días o semanas “ha bajado notoriamente”. El nivel amarillo representa que el volcán está activo y tiene cambios en su comportamiento, pero que no hay indicios de que vaya a hacer erupción.

El SGC explica que a pesar de la inestabilidad que aún persiste en el Ruiz, a lo largo de las últimas semanas los parámetros que ha evaluado la entidad “no han sido drásticos”. Las fluctuaciones han sido menores y han tendido a disminuir. El Servicio, sin embargo, advierte que todavía es posible que ocurran fenómenos como el aumento de la actividad sísmica, sismos perceptibles, emisiones de cenizas, lahares, cambios morfológicos, ruidos y olores de gases volcánicos.

El director técnico de geoamenazas del SGC, John Makario Londoño, explicó: “El Ruiz se encuentra como un paciente que lleva muchos días en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), que ha empezado a estabilizarse y que, por esa razón, es trasladado a una habitación con toda la precaución del caso”. Londoño aseguró también que un fenómeno natural como una erupción volcánica no es predecible, por lo que es clave mantener la preparación y la atención en la evolución del volcán.

Por primera vez en casi 11 años, el Nevado del Ruiz estuvo en alerta naranja durante 89 días. La última vez había sido en abril de 2012. El naranja representa la posibilidad de erupción en cuestión de semanas o días. Tras la emisión de la alerta, en marzo, las autoridades activaron los comités de gestión de riesgo en los cinco departamentos que más podrían verse afectados en caso de que hubiera una erupción: Tolima, Caldas, Risaralda, Quindío y Cundinamarca.

El Nevado del Ruiz desencadenó el desastre natural más devastador de la historia de Colombia cuando, en la noche del 13 de noviembre de 1985, entró en una erupción que desató una avalancha que borró del mapa a Armero, una de las poblaciones principales del departamento del Tolima. Aquella vez, cerca de 25.000 personas, la mayoría del total de la población, murieron sepultadas por el lodo. A pesar de que en Colombia hay muchos otros volcanes en actividad, el recuerdo de Armero hace que el Ruiz sea, de alguna manera, el más temido.

Aunque el glaciar del Ruiz ha disminuido en los últimos 38 años, John Makario Londoño advirtió en una entrevista con este diario que el volcán tiene capacidad para generar flujos de lodo incluso más grandes que los que hubo en Armero. El Nevado, explicó, tiene mucha agua en su interior que, en el momento de una eventual erupción, puede coincidir con los ríos que pasan por el lugar. Por eso, a lo largo de la alerta naranja, Londoño y el SGC mencionaron permanentemente la importancia de mantener la preparación y los planes de atención y evacuación. “Armero es una tragedia que nunca se debe repetir”, dijo.

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