Las primeras fuerzas internacionales de paz empiezan a entrar en Kabul

El primer contingente de fuerzas internacionales desplegadas en Afganistán ha empezado a entrar hoy discretamente en Kabul, la víspera de la toma del poder del Consejo Interino de Gobierno que encabezará como primer ministro Hamid Karzai.

La avanzadilla de estas tropas internacionales, pertenecientes al ejército británico, llegaron desde el aeropuerto de Bagram, 40 kilómetros al norte de Kabul, donde se encontraban estacionadas las tropas inglesas desde que culminó con éxito la intervención exterior de fuerzas terrestres.

Ayer, 53 soldados de la marina real inglesa llegaron a Bagram para unirse a otros 150 efectivos del ejército británico que estarán mañana sábado en Kabul para garantizar la seguridad junto a otras fuerzas afganas durante la toma del poder del Consejo Interino surgido de los acuerdos de Bonn (RFA).

También tropas españolas

Tropas españolas, italianas, canadienses y jordanas formarán parte, junto a las británicas, del primer despliegue de la Fuerza Internacional de Asistencia y Seguridad (ISAF) en Afganistán, según ha revelado el ministro de Exteriores británico, Jack Straw, en una entrevista que hoy publica el diario The Independent.

De acuerdo con la información de este diario, el jefe del Foreign Office afirmó que "las tropas españolas, italianas, canadienses y jordanas se unirán a las británicas en el despliegue inicial" sobre Afganistán. Straw aseguró además que la presencia de Alemania y Francia en la ISAF "llevaría más tiempo", con el fin de que estos dos países "resuelvan sus problemas internos", entre los que incluyó la negativa alemana a que la Fuerza Internacional pueda quedar bajo el mando global estadounidense.

Ayer, el Consejo de Seguridad de la ONU autorizó por unanimidad el despliegue para seis meses de la fuerza internacional en Kabul y sus alrededores. Los quince miembros del Consejo votaron en unos minutos la resolución 1.386, presentada por Reino Unido y Francia. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, asistió a la votación. La resolución se rige por el capítulo VII de la Carta de las Naciones Unidas, lo que permite a los soldados internacionales utilizar la fuerza para cumplir con su mandato. Una primera avanzadilla de 53 miembros de los 'marines' británicos llegó ya ayer a la base aérea de Bagram, en Afganistán, para constituir el principio de la ISAF en el país.

Trillo ofrece 700 soldados

Por otra parte, el ministro de Defensa español, Federico Trillo-Figueroa, ha confirmado que España está dispuesta a ofrecer hasta 700 soldados para participar en la citada fuerza internacional que, bajo mandato de la ONU, se encargará de garantizar la seguridad del gobierno interino afgano. "Serán hasta 700, en función de la necesidad que puedan requerirnos los contribuyentes, y sobre todo el Reino Unido, que es quien va a llevar el mando de la fuerza internacional y quien a partir del sábado comunicará la decisión final", aseguró el ministro de Defensa en una entrevista concedida a la cadena SER.

Según el ministro, este contingente internacional no va a exceder inicialmente de 3.000 hombres, ya que hay que buscar un "equilibrio" entre lo que desea Naciones Unidas y lo que desean las nuevas autoridades afganas, que tienen que mantener la seguridad y asumir sus responsabilidades en la normalización del país.

Irak no es sospechoso

En la misma entrevista en la que adelantó que España estará entre los primeros países que desplegarán tropas en Afganistán, Jack Straw desmintió la existencia de cualquier relación entre Irak y los ataques terroristas del pasado 11 de septiembre, al tiempo que minimizó las especulaciones que apuntan a que Estados Unidos llevará a cabo una acción militar contra el régimen del presidente Sadam Hussein. Straw es categórico: "No hay ninguna prueba que relacione a Irak con los ataques del 11 de septiembre", afirma. Y añade: "Sobre esta base, el único teatro de operaciones militares en el que estamos implicados actualmente es el de Afganistán".

El jefe de la Diplomacia británica elogió el modo en que las autoridades estadounidenses se han conducido en esta crisis. "Las decisiones tomadas por la administración americana han sido prudentes y reflexivas hasta el momento. No tengo ninguna razón para creer que esto no va a continuar".