EE UU se plantea acusar de traición y asesinato al americano protalibán

El departamento de Justicia estadounidense podría acusar a John Walker, el joven norteamericano capturado cuando luchaba junto a los talibanes en Mazar-i-Sharif, de traición y asesinato de un agente de la CIA, según ha informado la CNN citando fuentes de dicho departamento.

Los portavoces de Justicia han dado a conocer una lista de seis leyes federales que podrían aplicarse contra el joven John Walker. Estas mismas leyes también podrían tener efecto sobre cualquier otro ciudadano estadounidense que hubiera colaborado junto a Al Qaeda o los talibanes.

Todavía no se ha tomado una decisión al respecto, pero los funcionarios del departamento de Justicia han dejado claro que los cargos de traición y asesinato son los que acarrean el castigo más grave, la pena de muerte.

Walker, un joven californiano de 20 años, está herido a raíz de su participación en la sublevación de prisioneros en una cárcel militar cercana a Mazar-i-Sharif que se saldó con varios centenares de muertos. Entre los fallecidos en aquel motín está el agente de la CIA Mike Spann, la primera víctima en combate de los estadounidenses en Afganistán.

El senador republicano John McCain, que fue prisionero de guerra en Vietnam, ha pedido a los estadounidenses que no prejuzguen a Walker para que el departamento de Justicia investigue a fondo el caso.

Dicho departamento ha manifestado que la posibilidad de aplicar los seis cargos que se barajan "depende de la naturaleza y extensión de la implicación de John Walker con las actividades de los talibanes.

Los cargos potenciales de los que se podría acusar a Walker son:

Traición:

Adhesión a los enemigos de EE UU, proporcionándoles ayuda, de una persona que debe obediencia a EE UU.

Asesinato de un empleado del Gobierno de EE UU:

El asesinato de un oficial o empleado de EE UU mientras está encargado de tareas relacionadas con su cargo.

Asesinato en el extranjero de un ciudadano estadounidense:

Para casos de asesinato de otro ciudadano de EE UU dentro de la jurisdicción de otro país. Este mandato requiere la aprobación del Fiscal General y la demostración de que dicho estado es incapaz de asegurar la presencia del acusado en el juicio.

Asesinato en el extranjero de un ciudadano de EE UU con un objetivo terrorista:

El asesinato de un ciudadano estadounidense fuera del territorio nacional (o el intento de hacerlo o conspirar para ello) cuando, en opinión del Fiscal General, el ataque está dirigido a intimidar y atemorizar a un Gobierno o a la población civil. La decisión del Fiscal General de definir el crimen como un acto de terrorismo no está sujeo a revisión judicial.

Conspiración:

Se pueden aplicar dos leyes distintas. Una requiere sólo el acuerdo para llevar a cabo una conducta prohibida. La otra requiere una participación activa del presunto conspirador para el fomento de la conspiración.

Suministro de materiales o apoyo a los terroristas:

Prohíbe el suministro de materiales y ayudas a terroristas, lo que incluye a Al Qaeda, porque es una organización terorista extranjera.

-Penas máximas: 15 años de cárcel, cadena perpetua, o pena de muerte, en caso de que hubiera algún muerto en la acción de apoyo.