Bush asegura que EE UU será más fuerte que nunca tras los ataques
El presidente emite un mensaje televisado desde Atlanta cuando se cumple un mes de la campaña militar
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, ha emitido un mensaje televisado a la nación no sólo para informar a la opinión pública de los resultados de la Operación Libertad Duradera. Bush ha buscado fundamentalmente reforzar el ánimo de los estadounidenses tras los atentados y la amenaza del ántrax y les ha asegurado que la nación volverá a ser más fuerte que nunca.
Bush ha dado esta noche una imagen de fortaleza y optimismo durante el discurso ante la nación, para el que ha elegido un lugar no poco signficativo: el Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Atlanta, un organismo federal que ha asumido la investigación del origen del ántrax. El presidente se ha dirigido a un país que según sus palabras es ahora más triste y menos inocente; más fuerte y más unido.
Allí, el presidente ha sido interrumpido constantemente por los aplausos de centenares de personas de las que ha querido rodearse esta noche Bush, como bomberos, policías y militares, todos ellos erigidos como héroes en la crisis abierta tras los atentados.
"Nadie de nosotros hubiera deseado el mal que se le ha hecho a nuestro país. Sin embargo, hemos aprendido de que del mal puede surgir un gran bien", ha dicho el mandatario, que sin embargo, ha reconocido una vez más que su Gobierno todavía no ha aclarado el origen de los ataques con ántrax, que se han cobrado ya la vida de cuatro personas y el pánico de toda una nación.
El presidente estadounidense también ha dicho que durante los casi dos meses transcurridos desde los atentados "hemos demostrado que Estados Unidos es un gran país". "Nuestro gran desafío es apresar a los terroristas y fortalecer nuestra protección contra futuros ataques. Nuestra gran oportunidad nacional es preservar para siempre el bien que ha surgido", según el extracto del discurso del presidente.
La guerra no acaba en Afganistán
Una vez más, Bush ha advertido de que la guerra lanzada contra el terrorismo será prolongada y que va más allá de la campaña militar contra Afganistán. En este sentido, el mandatario se refería al aviso que lanzaba en las úlitimas horas a Irak, país al que señalaba como próximo objetivo. "Estamos comenzando en Afganistán y Afganistán es el comienzo de la campaña contra el terrorismo global", ha señalado Bush.
Pero el presidente también ha buscado la forma de alentar a la población a que mantenga la calma bajo la promesa de que los culpables de los atentados pagarán por sus actos. Y ha reiterado su petición a los ciudadanos para que afronten el desafío de estar alerta ante nuevos atentados y para que permanezcan en constante vigilancia sobre cualquier actividad sospechosa.
El discurso, pronunciado casi dos meses después de los ataques ataques del 11 de septiembre, forma parte de la intención del gobierno por poner al día a los estadounidenses sobre la ofensiva lanzada en Afganistán y el terrorismo biológico en el país.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.