La 'Y' vasca, nuevo objetivo de ETA después de Lemóniz y Leizarán
Los terroristas consiguieron que no se abriese la central nuclear de Lemóniz y que la autopista de Leizarán cambise su trayecto.- Ahora actúan contra el tren de alta velocidad, que supondrá un incremento anual del 1,30% del PIB de la Comunidad
La central nuclear de Lemóniz, que fue abandonada por las presiones, los boicots y los atentados contra las instalaciones y los trabajadores del lugar, y la autovía de Leizarán, que se inauguró tras haber cambiado de trazado, son los dos precedentes de gran obra en los que ETA puso su punto de mira, antes de colocar ahora como objetivo las obras del tren de alta velocidad, con el asesinato del empresario Ignacio Uria. Sin embargo, esta infraestructura ha recibido varios ataques y se desarrolla bajo un clima de tensión y miedo.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha garantizado hoy que la obra se hará porque es "fruto de la voluntad democrática".
La 'Y' vasca, que debe su denominación la figura que forma su trazado, es la línea ferroviaria de ancho europeo y alta velocidad que se está construyendo para unir las tres capitales vascas y a éstas con el resto de las vías similares de España y de Europa. Es una red mixta, que se destinará tanto al transporte de pasajeros como al de mercancías. Más del 70% del trazado discurrirá bajo túnel. Se construirán 80 en total y se levantarán, además, 71 viaductos.
Cálculos oficiales cifran en 6.900 los puestos de trabajo que generará la puesta en marcha de esta nueva infraestructura que, además, supondrá, según las mismas fuentes, un incremento anual del 1,30% del PIB de la Comunidad Autónoma. La financiación y ejecución depende del Ministerio de Fomento, apoyado por los fondos de la Unión Europea destinados a los proyectos estratégicos definidos en Essen.
En 1994, el Consejo Europeo reunido en Essen incluyó la línea de alta velocidad Madrid-Vitoria-Dax (en la que se enmarca la 'Y' Vasca) en el listado de proyectos estratégicos de la Unión Europea. El 24 de abril de 2006 el Ministerio de Fomento y el Departamento de Transportes y Obras Públicas del Gobierno Vasco firmaron el convenio de financiación de la 'Y' Vasca, valorado en 4.178 millones de euros.
Lemóniz y Leizarán
La central nuclear de Lemóniz, en la costa vizcaína, no llegó nunca a funcionar. Fue impulsada por Iberduero, empresa víctima de varios ataques terroristas, la actual Iberdrola, pero, tras varios parones, se abandonaron las obras con la central casi construida, después de que ETA hubiera asesinado a cinco personas. En concreto, mató a dos ingenieros, José María Ryan y Angel Pascual, y a otros tres trabajadores vinculados a las obras, Andrés Guerra, Alberto Negro y Angel Baños. Los edificios de cemento de la central siguen levantados en la costa vizcaína, sin uso veinticinco años después.
Una década después de Lemóniz, a principios de los noventa, ETA puso en su punto de mira la autovía de Leizarán, que conecta Guipúzcoa y Navarra. La obra comenzó en Navarra en agosto de 1989 y en Guipúzcoa en mayo de 1991, y el conflicto en torno a ella empezó con carácter ecológico, por los valores naturales del valle por el que transcurría, una afectación de la naturaleza que también ha sido esgrimida ahora por los que se oponen al tren de alta velocidad.
Desde el inicio de aquellas obras ETA asesinó a cuatro personas: dos empresarios y dos policías. Finalmente, las instituciones negociaron unas modificaciones en el trazado con la Coordinadora Lurraldea, cuyos dirigentes pasaron después a 'Elkarri'. Con estos cambios se terminó el conflicto y la autovía fue inaugurada en mayo de 1995, con un fuerte sobrecoste, puesto que las amenazas y los atentados de ETA hicieron que los dispositivos de vigilancia aumentaran notablemente
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