Bush se compromete a consultar a sus aliados antes de lanzar un ataque para derrocar a Sadam Husein

George W. Bush afirmó ayer que consultará a sus aliados antes de emprender cualquier acción contra Irak. El presidente de EE UU mantuvo una reunión informal con su plana mayor de Defensa en su rancho de Crawford (Tejas) en la que aseguró no se abordaron planes para derrocar a Sadam Husein. Las declaraciones de Bush pueden interpretarse como una respuesta a las recientes críticas, incluso entre los republicanos, sobre las apresuradas intenciones de Washington contra el líder iraquí.

Bush no pudo evitar hablar del tema, aunque sólo fuera para confirmar que no lo había mencionado durante su reunión. 'No hemos hablado de ello [Irak]', declaró a las puertas de su rancho en una breve conferencia de prensa junto al secretario de Defensa, Donald Rumsfeld. 'Tomamos todas las amenazas muy en serio y seguiremos consultando a nuestros aliados y amigos'.

La reunión, convocada la semana pasada, despertó todo tipo de especulaciones sobre la inminencia de posibles preparativos contra Irak, pese a las crecientes críticas de aliados como Alemania y Canadá, y de personalidades republicanas como el ex secretario de Estado Henry Kissinger. La ausencia del actual jefe de la diplomacia estadounidense, Colin Powell, de vacaciones en la costa neoyorquina, también contribuyó a alimentar los sempiternos rumores sobre su pérdida de influencia en la Casa Blanca.

En la entrevista de ayer participaron, además de Rumsfeld, el vicepresidente, Dick Cheney; la consejera de Seguridad Nacional, Condoleezza Rice, y el jefe del Estado Mayor Conjunto, general Richard Meyers. El motivo oficial de ls cita era analizar los nuevos objetivos de defensa de EE UU tras su retirada unilateral, el pasado 13 de junio, del Tratado sobre Misiles Antibalísticos (ABM) firmado con la Unión Soviética en 1972, y la presentación del presupuesto militar de 2004.

Pero es difícil concebir semejantes discusiones sin mencionar una operación contra Bagdad. 'Soy un hombre paciente', añadió Bush sobre Irak. 'Consideraremos todas las opciones y todas las tecnologías de las que dispongamos (...). Este Gobierno cree que Sadam Husein es una amenaza'.