_
_
_
_

Seis muertos en Siria en un nuevo viernes de protesta

La ONU calcula que han muerto entre 700 y 850 personas por la represión

Al menos seis personas han muerto y miles más han resultado heridas en las protestas antigubernamentales que se registraron ayer de nuevo en Siria tras las oraciones del viernes, según ha informado un activista de derechos humanos. Tres personas murieron en la tercera ciudad del país y epicentro de las revueltas, Homs, cuando las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los manifestantes. Otras dos personas perdieron la vida en un suburbio al norte de Damasco, la capital siria, y el sexto muerto se produjo en una localidad próxima a Deraa, origen de las protestas hace ahora mes y medio.

Miles de personas salieron ayer a las calles de varias ciudades de Siria en uno nuevo viernes de protestas contra el régimen de Bachar al Asad, que mantiene un fuerte despliegue militar para reprimir las manifestaciones. Después del rezo musulmán del mediodía, como ya es habitual, comenzaron las protestas en Damasco y en ciudades como Hama, Homs e Idlib, al norte de la capital, y Deir el Zur, al oeste, según varios grupos opositores. El inicio de la jornada, bautizada como "Viernes de los libres", estuvo marcado otra vez por la represión de las fuerzas del orden, que dispersaron con violencia una manifestación en el barrio de Al Mohayerin, en Damasco, donde detuvieron a varias personas, según ha informado el grupo opositor Flash.

Más información
Cronología de las revueltas en Siria
La UE sanciona a 13 miembros del régimen sirio por la represión
El Ejército bombardea y asalta con tanques el bastión rebelde de Homs
El clan Asad desplaza al presidente sirio
La primavera árabe se tiñe de sangre
La represión en Siria causa al menos otros cuatro muertos
Los opositores sirios denuncian el hallazgo de 26 cadáveres en dos fosas cerca de Deraa
EE UU impone sanciones económicas al presidente de Siria

En la ciudad de Daria, al este de la capital, las fuerzas de seguridad lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes. La red opositora Sham ha informado de que una gran manifestación tuvo lugar en Hama para pedir la caída del régimen sirio y el fin del bloqueo en Deraa y Banias. En Homs se celebró también una importante concentración reprimida por la policía y el Ejército. En la ciudad de Idlib unas tres mil personas secundaron las protestas, obstaculizadas por las fuerzas de seguridad.

Las muertes han ocurrido pese al llamamiento del presidente sirio de no disparar contra los manifestantes. "Se han dictado ordenes presidenciales definitivas para no disparar contra los manifestantes, y quien quiera que lo viole correrá con toda la responsabilidad", ha explicado el activista Louay Huseein, citando a la asesora presidencial y a la postre portavoz del régimen Buthaina Shaaban, con quien habló por teléfono ayer. Hussein es uno de los cuatro miembros de la oposición que se reunió con Shaaban este mes para presentarle sus exigencias, entre ellas el fin de la represión de las protestas y la introducción de reformas políticas en el país. Fueron los primeros encuentros entre opositores y altos cargos del régimen desde el comienzo de las protestas en marzo pasado.

"Espero que lo veamos mañana (por hoy)", dijo Hussein en referencia a la orden de no disparar. "Todavía hago llamamientos a que se proteste de forma no violenta a pesar de la respuesta de las fuerzas de seguridad", añadió en un comunicado. Sin embargo, el despliegue ayer de fuerzas de seguridad en localidades como Dael, Tafas, Jassem y al-Harra hace temer que este nuevo anuncio sea otra muestra del criticado doble lenguaje de El Asad, que ha prometido reformas a la vez que los tanques han ido tomando posiciones.

Entre 700 y 850 muertos, según la ONU

La represión de las protestas del régimen de El Asad, que comenzaron hace casi dos meses, le ha costado la vida a entre 700 y 850 personas, según la ONU. "No podemos verificar estos números, pero hay listas detalladas y creemos que son genuinos", ha dicho hoy el portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Rupert Colville. También un grupo de juristas con sede en Ginebra (Suiza) ha cifrado los fallecidos en 700. La Comisión Internacional de Juristas (ICJ en sus siglas en inglés) ubicada en Suiza sostiene, sin embargo, que según informes que han recibido de abogados y grupos defensores de los derechos humanos, las fuerzas armadas del régimen han matado ilícitamente a unos 700 civiles mientras otros cientos se encuentran desaparecidos, y han violado así el derecho internacional. "El ICJ sigue recibiendo informes creíbles de que se han dejado cadáveres tirados en la calle durante días y se ha impedido que los heridos accedan a centros médicos", ha informado la organización.

Hoy miles de kurdos se han sumado a laprotesta yhan salido a la calles en el este de Siria para reclamar el fin de la represión militar en el país, según han informado fuentes de la oposición kurda. "Las manifestaciones están aumentando en número", ha declarado Habib Ibrahim, líder opositor kurdo. De momento se han registrado protestas contra el régimen de Basharel Asad en la capital provincial, Qamishli, y en las localidades de Amouda y Derabasiyeh,c erca de la frontera con Turquía.

EE UU se limita a pedir cuentas a El Asad

La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, ha asegurado que Washington y sus aliados europeos pedirán cuentas al Gobierno de El Asad por la "represalias brutales" contra los manifestantes y que podrían reforzar las sanciones. No dijo, sin embargo, que el presidente deba dejar el poder.

Se ha criticado mucho a EE UU y Europa por el doble rasero de su actuación en Libia, donde la OTAN desarrolla una campaña de bombardeos aéreos para forzar la salida de Gadafi del poder, y las leves sanciones que han impuesto a Siria, que incluyen algunos bloqueos económicos a la cúpula del régimen pero excluyen al presidente.

Preguntada por la prensa si creía que El Asad había perdido su legitimidad para gobernar, Clinton se mostró recatada y se limitó a afirmar que Washington ha observado "con gran consternación y preocupación los acontecimientos que se han desarrollado bajo su liderazgo".

Imagen tomada con un móvil de una manifestación contra el régimen sirio en la ciudad de Camishli, en el noreste del país.
Imagen tomada con un móvil de una manifestación contra el régimen sirio en la ciudad de Camishli, en el noreste del país.ASSOCIATED PRESS

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_