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Columna
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‘Urgencias’: antes se abortaba mejor

Me pregunto qué sería hoy del bueno del Dr. Greene si efectuase las interrupciones de embarazos ectópicos como hacía en 1994

La actriz Alex Kingston como Elizabeth Corday y Anthony Edwards como Mark Greene en una foto promocional de 'Urgencias'.
La actriz Alex Kingston como Elizabeth Corday y Anthony Edwards como Mark Greene en una foto promocional de 'Urgencias'.NBC (NBCUniversal via Getty Images)

Como graduada cum laude en series de médicos —aprendí qué era el lupus viendo House, un condrosarcoma en Anatomía de Grey o la distrofia muscular de Duchenne en New Amsterdam— nada me ha arreglado más el verano que HBO Max haya recuperado las míticas ¡15! temporadas de Urgencias en su catálogo. Así que aquí ando en mis ratos libres, enfangada entre neumotórax, laceraciones y aneurismas; con la falsa creencia de que sería capaz de intubar endotraquialmente a un desconocido de tanto ver al Dr. Greene practicarlo en ese hospital universitario de Chicago.

Me pregunto qué sería hoy del bueno de Mark Greene si efectuase las interrupciones de embarazos ectópicos como hacía en su sala de Urgencias en 1994. Porque en el County General los ejecutaba sin dudarlo. Un embarazo ectópico es el que se desarrolla fuera del útero. Puede ser mortal para la madre si se lleva a término, por lo que cuando se detecta, se interviene para interrumpirlo antes de que se rompa la estructura y la paciente se desangre internamente. No es así ya en EE UU.

Este verano, en el Hospital Central de Texas —uno de los estados más restrictivos en derechos reproductivos tras la derogación de Roe Contra Wade—, se instruyó a un médico para que no lo tratara hasta que ocurriera una ruptura, según denunció en una carta de un grupo de médicos alarmados ante el panorama legal que les depara. Al doctor Greene nadie se planteó frenarlo el siglo pasado y me angustio anticipando que quizá Meredith Grey se enfrente en otoño de 2022 al equipo de abogados de su hospital para salvar a una paciente. Otra ficción superada por la realidad que amenaza a nuestros cuerpos.

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