París restringe la circulación de coches en el centro a los residentes y a los viajes puntuales

Con la medida, en fase de pruebas hasta enero,se busca reducir el tráfico en un 30%, mejorar la calidad del aire y disminuir el ruido en esta concurrida área

Una de las calles cercanas a la Torre Eiffel de París, cortada al tráfico.NurPhoto (NurPhoto via Getty Images)

El tráfico en el centro de París había descendido considerablemente en los últimos tiempos. El aumento de los carriles bici y la pérdida de espacio para el automóvil habían complicado la circulación disuadiendo, de paso, a muchos conductores. También la reducción de la velocidad o la nueva zona de bajas emisiones. Sin embargo, el Ayuntamiento de París, liderado por ...

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El tráfico en el centro de París había descendido considerablemente en los últimos tiempos. El aumento de los carriles bici y la pérdida de espacio para el automóvil habían complicado la circulación disuadiendo, de paso, a muchos conductores. También la reducción de la velocidad o la nueva zona de bajas emisiones. Sin embargo, el Ayuntamiento de París, liderado por Anne Hidalgo, ha decidido cumplir su promesa electoral y restringir la circulación en los cuatro distritos más céntricos a los vehículos de residentes y de quienes vayan a hacer algo concreto a esa zona: compras, cenas, copas, visitar amigos, familia, cuidados médicos… Una larga lista que solo excluiría a quienes utilicen el centro para ir a otros puntos de la ciudad y que, además, deberá contrastarse caso por caso porque la ley no permite implantar controles fotográficos como en otras ciudades.

El martes por la mañana, más allá de los carteles naranja donde se anunciaba la medida, nadie parecía estar demasiado preocupado con la entrada en vigor del nuevo plan. Ningún conductor se veía afectado aunque, eso sí, los improperios contra la alcaldesa siempre afloran al abordar los asuntos del tráfico. De momento, el Ayuntamiento ha abierto un periodo de seis meses, una fase de “pedagogía” para el público en general y de consultas con los profesionales involucrados. Al final de este plazo, una nueva orden especificará el modo de aplicación. “Nadie será multado”, aseguró Nicolas Nordman, adjunto de seguridad de Hidalgo, el lunes por la noche en la Plaza de la Bastilla al periódico Le Monde. De momento, en lugar de imponer multas de 135 euros, la policía municipal distribuía folletos explicativos a los conductores que miraban algo extrañados. “La verdad es que no lo entiendo. Me parece una estupidez. Estos controles van a generar más tráfico que los vehículos circulando normalmente”, señala Bernard Laurent desde la ventanilla de su Smart.

La normativa busca reducir el tráfico en un 30%, mejorar la calidad del aire y disminuir el ruido en esta concurrida área, según el Ayuntamiento. Junto con Lyon, París está entre las ciudades donde los niveles de contaminación aún superan los límites, pese a varias condenas a Francia por parte de la Corte de Justicia de la Unión Europea y del Consejo de Estado.

La idea es evitar el tráfico que utiliza la ruta del centro para dirigirse a otra punta de la ciudad, evitando los habituales atascos del périphérique, algo que obligará también a trabajar con operadores como Google Maps y Waze para que los itinerarios sugeridos integren la ZTL. Pero la prohibición es a su vez muy restringida, porque los trabajadores de cuidados a domicilio, repartidores, residentes de los distritos involucrados, sus amigos y familiares, personas que trabajan en esas áreas, y aquellos que deseen ir allí a tomar algo, comprar algo o realizar cualquier otra actividad, podrán hacerlo en coche, camioneta o motocicleta, siempre que tengan un punto de origen o destino dentro del perímetro. La clave es cómo se demostrará, pero no hay una respuesta oficial todavía, porque a diferencia de otros países como Italia, la ley francesa no permite la imposición de sanciones a través de cámaras dentro de la ciudad.

Italia es el país de la Unión Europea con más zonas ZTL. Más del 80% se encuentran en ciudades del país transalpino que querían preservar sus centros históricos como Roma, Génova o Milán. En Francia, Nantes inició el movimiento en 2012, seguida de Grenoble en 2017. En París no había sucedido todavía, pero las políticas implementadas por la izquierda desde principios de los años 2000 han transformado profundamente la capital. Bertrand Delanoë inició el movimiento, y Anne Hidalgo lo amplió (peatonalización de las vías junto al río, creación de más de 1.000 kilómetros de carriles bici, adaptación de calles cercanas a las escuelas). Además, desde 2021, se redujo la velocidad a 30 kilómetros/hora en prácticamente todas las vías de la ciudad.

La medida se considera un complemento de la zona de bajas emisiones, que se lanzó en París en 2016 y se amplió a toda la metrópoli en 2019, con el objetivo de restringir progresivamente la circulación de vehículos más antiguos y contaminantes (diésel y gasolina). A partir del 1 de enero de 2025, la prohibición se extenderá a los vehículos diésel de más de 14 años y gasolina de más de 19 años, lo que afecta aproximadamente a un cuarto del parque móvil parisino.

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