Las claves para recrear el cardado que rescató Miley Cyrus: “Es muy elaborado y necesitas llevar un bote de laca en el bolso”

En el nuevo videoclip de Miley Cyrus, Doctor (Work It Out), publicado hace unas semanas, la artista baila con movimientos de inspiración yeyé mientras su larga melena mantiene un espectacular volumen a pesar del potente ventilador que la enfoca. Tanto el estilismo como el peinado nos recuerdan mucho a su alabadísimo paso por los premios Grammy y confirman que Cyrus está dispuesta a explotar esta nueva faceta de tintes retro. Una estética que no solo se alimenta de recuperar diseños vintage ­–como el vestido de Bob Mackie que llevó para la citada actuación– sino también del icónico peinado que la acompaña desde entonces. Un cardado de proporciones considerables obra de Bob Recine. “El año pasado realicé un look de efecto mojado para Miley”, explica el peluquero en su cuenta de Instagram, “este año decidimos que queríamos algo seco y más grande, con el pelo más voluminoso, pero sexy, despeinado y palpable”.

El peluquero Juandiegoteo apunta al claro referente musical que todos evocamos inevitablemente cuando vemos este peinado: Dolly Parton, madrina artística de Cyrus: “este pelo es un claro homenaje al cardado de la reina indiscutible del country”, afirma. La clave para conseguir este peinado, según Juandiegoteo, hair designer y embajador de Redken, es aportar volumen y densidad con ayuda de una buena cantidad de laca. “El primer paso sería, después de lavar el cabello con champú de volumen y acondicionador, aplicar una loción o espuma de volumen para crear estructura en la raíz y comenzar a secar con mucho volumen. Se marca la melena con ondas muy anchas, redirigiéndolas hacia atrás para crear una melena muy esponjosa. Con la ayuda de un peine crepamos la zona superior de la cabeza acomodando el cabello”.

Para Raquel Moreno, estilista del salón The Beauty Concept Hair, es imprescindible preparar muy bien la base para que aguante en todo momento y no se desmorone ya que de lo contrario el efecto es muy feo. Es un peinado, apunta, muy elaborado y que exige mucho tiempo porque se debe trabajar muy bien, siendo la parte interna la más compleja, pues es con la que se consigue esa estructura ahuecada. También el uso de productos adecuados, tanto para la base como para el acabado, son fundamentales, “para conseguir que el cabello se eleve y que este volumen no se estropee por culpa, por ejemplo, de la humedad. El cepillo o los cepillos con los que se va a rematar el peinado y la habilidad manual son muy importantes”, apunta. La estilista de The Beauty Concept Hair no recomienda este peinado para cabellos muy finos o con poco volumen ya que “se partiría de una base poco sólida sobre la que construir y cardar”. También influyen las condiciones del clima a las que nos expongamos, que aguante bien durante horas “depende mucho del tiempo, más de lo que creemos porque, por ejemplo, si va a hacer mucho viento y se va a estar al aire libre, no lo recomendaría”, señala. Juandiegoteo nos aconseja llevar un pequeño bote de laca en el bolso para ir retocando el peinado a lo largo de la noche: “si el peinado está bien fijado no hay que tener miedo. Pero si vamos a estar mucho rato fuera de casa: una cena, luego salimos, etc. lo ideal es llevar un bote pequeño con espray de fijación en el bolso para retocar de vez en cuando. Al igual que se lleva un pintalabios o unos polvos de sol, ¿por qué no un bote de laca pequeño?”.

Más allá de Dolly Parton, lo cierto es que el cardado ha estado presente en la estética femenina a lo largo de varias décadas, adoptando el volumen en diferentes zonas de la cabeza. En los años 50 era la zona de la coronilla la que cobraba protagonismo gracias al peinado bouffant, creado por Raymond Bessone. Lo llevaron desde Jacquie Kennedy hasta Priscilla y la manera de peinarlo es totalmente diferente, tal y como nos explica Juandiegoteo: “En varios documentos de la época se dice que sus estilistas cardaban el pelo en la coronilla, para elevar y redondear el peinado y, posteriormente, lo fijaban con laca. Luego lo demás se peinaba liso y se marcaba ligeramente una onda en las puntas. Es un look que hemos visto más recientemente en celebrities, por ejemplo, como la cantante Lana del Rey”.

El cardado pasaría después a considerarse un peinado vulgar que resultaba ostentoso o relegado a las mujeres de avanzada edad que todavía llevaban a rajatabla la visita diaria a la peluquería. Miley Cyrus parece estar decidida a darle a la melena cardada la relevancia de décadas atrás. Y solo ella podría conseguirlo.