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¿Caducan los cosméticos? Cuánto tiempo se pueden guardar y qué consecuencias tiene usarlos obsoletos

Expertos aclaran cuál es la vida media de un fondo de maquillaje, una barra de labios o un delineador y cómo saber cuándo no se deben usar

¿Caducan los cosméticos? Cuánto tiempo se pueden guardar y qué consecuencias tiene usarlo obsoleto
Los cosméticos con más de tres años de antigüedad pueden generar problemas en la piel.Carol Yepes (Getty Images)

Si tu neceser acumula multitud de barras de labios, sombras, coloretes y cosméticos que guardas como un tesoro desde tu época de secundaria, sentimos decirte que ha llegado el momento de deshacerte de la mayoría de ellos. Porque todos los productos tienen una fecha de caducidad y, aunque pueda resultar difícil saberlo, su vida útil es mucho más corta de lo que creemos. Cuesta deshacerse de esa paleta de sombras que solo usamos en ocasiones especiales o del rojo de labios perfecto capaz de animar cualquier día gris en segundos. Sin embargo, las fechas de vencimiento de los cosméticos no son una broma: un producto caducado no es tan eficaz ni se asienta en la piel de la misma manera que uno recién estrenado.

Según Mariona Vila, product manager de la división de maquillaje de Sensilis, “utilizar productos caducados provoca la aparición de gérmenes y bacterias, y disminuye su seguridad. Existe el riesgo de sufrir erupciones cutáneas, infecciones, irritaciones, eccemas, alergias y sensación de ardor al utilizarlo”. Y advertimos: la mayoría de los expertos coincide en que no se debe utilizar ningún producto cosmético transcurridos tres años desde su apertura.

A diferencia de los productos que tenemos en la nevera, en los cosméticos debemos diferenciar la caducidad propiamente dicha, que viene indicada en el envase, y el tiempo que estará en perfectas condiciones tras su apertura, lo que se denomina PAO, siglas que provienen de la expresión sajona Period After Opening. “Mientras que la fecha de caducidad se suele referir al periodo general de vida de un producto antes de abrirse, el PAO indica cuánto tiempo estará el producto en condiciones óptimas una vez abierto. Este dato viene siempre con un símbolo de un tarro abierto y nos señala con un número y una M la cantidad de meses que el producto puede estar abierto”, analiza Raquel González, cosmetóloga de la firma de cosmética Perricone MD.

¿Y qué pasa si no pone nada? “Cuando un cosmético no incluye la fecha, es porque su caducidad es superior a 30 meses. Cuando se pasa esta frontera de tiempo, la Unión Europea no exige especificar la fecha porque, es tanto tiempo, que sería difícil concretarla, además de que se sobreentiende que el producto se habrá consumido antes de ese límite, puesto que un cosmético suele durar una media de tres a seis meses con un uso continuado medio”, explica González.

Para quien no esté atento al paso del tiempo en estos productos existen ciertas señales que indican que un cosmético ha caducado. “Cualquier cambio en textura, color y aroma o si vemos que los ingredientes se han separado en partes son indicios de que ya no es apto para su uso”, dice Raquel González.

¿Hay cosméticos más peligrosos que otros o susceptibles de generar una reacción si se utilizan caducados? “Lo que pueda ocurrir al entrar en contacto con la piel depende mucho de su formulación. En productos de color, lo más habitual es que se rompan las emulsiones y se separen los componentes. Pero si llevan ingredientes más allá de pigmentos, pueden oxidarse o desestabilizarse pasado el periodo recomendado de uso, y esto es lo que provoca alteraciones en la piel”, aclara Sonia Ferreiro, biotecnóloga de la firma de cosmética avanzada Byoode.

Mariona Vila, de Sensilis, advierte “como norma general” que “los productos que no contienen ni agua ni aceites tienen una vida útil más larga porque existe menor riesgo de sobrecrecimiento bacteriano. Además, siempre recomendamos guardar los productos de maquillaje, las brochas y las esponjas en un sitio donde no haya humedad, por eso hay que huir de la zona del baño. Es aconsejable rociar brochas y esponjas con un antiséptico después de cada uso o limpiarlas regularmente con jabón”.

GUÍA DE PRODUCTOS SEGÚN SU CADUCIDAD

Base de maquillaje

Su vida útil es de seis meses a un año. “Un fondo caducado puede tener mal olor y una textura rara al aplicarlo. Las bases contienen ingredientes que se separan cuando caducan y la fórmula se corta. Los aceites siempre suben a la superficie, por lo que, si se continúa usando, es posible que obstruya los poros. Esto puede provocar el llamado acné cosmético, causado por una obstrucción en los poros que provoca el crecimiento de bacterias. Es importante hacer caso a la vida útil que cada comerciante indique en su cosmético”, advierte Mariona Vila, de Sensilis. Para evitar el acné cosmético, siempre es mejor agitar la base antes de aplicarla, incluso si es nueva. Además de estos efectos, la degradación de la eficacia de un producto puede ser peligrosa, especialmente en caso de que la base contenga SPF y ya no aporte la protección solar que debería. Cualquier irritación en la piel después de usar una base es una señal de que está caducada, aunque también puede que tu piel haya desarrollado sensibilidad a algún ingrediente. Siempre se recomienda el diagnóstico de un dermatólogo que determine la causa de la erupción y prescriba el tratamiento adecuado.

Rubor e iluminador

Los coloretes en polvo duran alrededor de dos años en buenas condiciones. Sin embargo, la vida útil del rubor en crema es de 12 a 18 meses. “Los rubores, aunque se toquen con las manos, están formulados para que sean estables con este modo de uso y solo les afecta su PAO. Pero es importante tocarlos con las manos o las brochas completamente limpias para no introducir bacterias en el producto”, afirma Sonia Ferreiro. Las bacterias no prosperan en los ambientes secos, por eso los polvos duran bastante. “La mejor manera de mantener un colorete en polvo es raspando suavemente la capa superior. Los aceites del rostro pueden invadir el polvo a través de la brocha y formar una película dura en la superficie. Los rubores en crema que requieren el uso de los dedos para introducir en el bote conviene tirarlos al año para evitar agregar bacterias a la piel. Usar colorete en crema caducado irrita la piel y obstruye los poros. Si se nota una consistencia pastosa, probablemente sea hora de decir adiós a ese producto. Para evitar que esto pase, es importante cerrar bien el envase después de cada uso”, explica Valeria Zimmermann, maquilladora de Bigudí. Con los iluminadores ocurre algo parecido que con los coloretes. Los que son en polvo pueden durar hasta dos años y los líquidos un año. Se recomienda guardarlos en un lugar fresco y seco.

Máscara de pestañas

Los maquilladores profesionales coinciden en que lo ideal es reemplazarla cada tres meses. Si se utiliza más tiempo se vuelve grumosa, seca, el pigmento deja de fijarse bien a las pestañas y tiende a desprenderse por el rostro. “Las pestañas protegen los ojos y evitan que entren contaminantes y partículas del medio ambiente. Cuando aplicamos la máscara y la volvemos a sumergir en el tubo, cualquier cosa que se acumule en ella entrará dentro con los consiguientes problemas como irritaciones, ojos rojos e incluso lagrimeo”, aclara Valeria Zimmermann. Las señales que indican que la máscara se ha echado a perder es que desprende un olor extraño, está grumosa y ya no mantiene intacta todo el día. “El aroma de un producto es una buena pista de que ha caducado. La degradación de los ingredientes o la contaminación alteran su olor. Y, por supuesto, no recomiendo compartir máscara, ya que puede provocar contaminación cruzada”, dice Zimmermann.

Delineado, corrector y sombra de ojos

En general, los delineadores en lápiz pueden durar más de un año después de abiertos, los de gel de seis meses a un año y los líquidos de tres a seis meses. “Un delineador en lápiz, al ser anhidro, tiene más durabilidad que uno en gel, ya que este último contiene emolientes en su formulación. Utilizar un delineador caducado es el origen de la aparición de conjuntivitis, irritaciones, infecciones y orzuelos”, apostilla Mariona Vila. Cuando comienza a perder su color, se seca o se vuelve ineficaz, lo mejor es tirarlo. Con las sombras ocurre algo similar que con los productos en polvo, pero hay matices. “Las de formato polvo duran un año y las de barra de tres a seis meses. Aconsejo reemplazarlas con frecuencia porque se usan alrededor de la delicada piel de los ojos. Cuando caduca, el polvo se descompone, se cuartea, no tiene fijación y presenta cambios de olor”, aclara Vila. Al igual que la base, el corrector de ojeras puede durar hasta un año. Es importante mantener el producto alejado de la luz solar directa y evitar tocar la aplicación con los dedos. A la mínima separación de los ingredientes, ha llegado la hora de tirarlo.

Lápiz y barra de labios

Los lápices labiales y las barras tienen una vida útil de un año. Hay que tener cuidado con los cambios de textura cuando se trata de productos para los labios. Es la piel más fina del cuerpo y susceptible a la infección por bacterias. “Si un producto adquiere un color diferente, puede indicar que ha caducado porque es el resultado de la descomposición del pigmento o la oxidación del producto después de una exposición repetida al exterior”, avisa Miquel Bling, maquillador de You Glow Salon. En cuanto notes un cambio en la textura de las barras, porque está seca o pegajosa, toca reemplazarla.

Esponjas de maquillaje

Las esponjas tienen una vida útil muy corta y los expertos aconsejan renovarlas a los 30 días. “Es importante sustituir la esponja cada mes para evitar la acumulación de bacterias. Además, después de cada uso, recomendamos enjuagarla con agua tibia para mantenerla lo más fresca posible. Utilizarla más allá de esta fecha puede provocar irritaciones cutáneas, erupciones e incluso infecciones”, comenta para SModa Ina Rakas, de Real Techniques.

Brochas de maquillaje

Aunque no existe un periodo establecido para renovar las brochas de maquillaje, con el tiempo las cerdas se desgastan y su rendimiento disminuye. “Se recomienda reemplazarlas cuando pierdan la forma, las cerdas estén desgastadas o se desprendan debido al deterioro del pegamento. Además, si no se limpian con regularidad, las brochas pueden acumular bacterias al estar en contacto con la piel y otros productos de maquillaje. Y las bacterias siempre implican imperfecciones”, concluye Silvia Quirós, asesora de Maiko.



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