Adiós al Photoshop: Kate Winslet firma un contrato para que no retoquen sus fotos
La actriz firma una cláusula con L’Oreal para acabar con la manipulación digital porque quiere contarle la verdad sobre quién es «a las nuevas generaciones que merecen tener líderes fuertes».
No es la primera vez que Kate Winslet se opone públicamente al retoque fotográfico y los abusos del Photoshop en las fotografías que protagoniza para revistas y anuncios. Pero, además de denunciar que sus arrugas y líneas de expresión se borren de golpe o que sus proporciones sean falsamente reducidas por obra y gracia del retoque por ordenador (como han hecho recientemente otras famosas como Zendaya o Inma Cuesta), la actriz ha decidido poner fin a todo atisbo de perfeccionamiento digital de formal legal.
La actriz, de 40 años de edad y madre de tres hijos, ha pedido incluir en su nuevo contrato con L'Oreal una cláusula por la que los anuncios e imágenes realizados para la marca Lancôme, de la que es embajadora, deben estar desprovistos de retoques digitales. "Solo puedo hablar por mí misma y hacer lo que considero que es importante para mí. Espero que otras personas puedan seguir el ejemplo porque creo que tenemos una responsabilidad con las generaciones de mujeres más jóvenes", ha manifestado Winslet a la publicación E! Online.
Con la idea de sentirse responsable con todas las mujeres que leen las revistas y consumen publicidad, y apoyada por la marca que ha permitido incluir esta nueva petición en su contrato, la actriz británica da un significativo paso en la lucha contra la manipulación fotográfica, la belleza tiránica y la distorsión de la realidad causada por el programa más famoso de Adobe. "Creo que las jóvenes miran las revistas y ven a mujeres que han triunfado en sus carreras profesionales, y por tanto quieren parecerse a ellas. Me encantaría contarle la verdad sobre quién soy a esa generación porque se merecen tener líderes fuertes. Todos somos responsables de educar a mujeres con personalidad, y esas cosas son importantes para mí”, ha añadido.
Kate Winslet en una campaña publicitaria.
En numerosas ocasiones la británica había abogado por la naturalidad y en una entrevista en 2009 a la revista Harpers Bazaar explicó cómo en más de una ocasión había pedido que se eliminara el Photoshop de sus imágenes después de ver un resultado en el que no se reconocía. “El envejecimiento no es algo malo […] Prefiero que digan 'parece mayor' a que digan 'parece retocada'”, sentenció en aquella ocasión.
En las últimas semanas, otras celebrities se han animado a denunciar el uso del Photoshop. Primero fue Inma Cuesta quien escribió un alegato en su cuenta de Instagram en contra del retoque digital. “Verte y no reconocerte, descubrir que tu imagen está en manos de personas que tienen un sentido de la belleza absolutamente irreal. Imagino que era necesario resaltar el azul cobalto del vestido, quitar algunos pliegues del mismo y subir los niveles de luz para hacer brillar más mi piel, pero no entiendo la necesidad de retocar mi cuerpo hasta dejarme casi en la mitad de lo que soy, alisar mi piel y alargar mi cuello hasta convertirme casi en una muñeca sin expresión […]".
Después de incendiar los medios y redes sociales nacionales con su publicación, era Zendaya la siguiente en sumarse a la lucha anti-retoque a escala global. De nuevo fue Instagram el espacio elegido para publicar la foto original, tomada para la revista Modeliste, justo al lado de la retocada (donde sus caderas y piernas son más delgadas que las reales). “Una nueva sesión de fotos ha salido hoy y me he quedado muy sorprendida al comprobar que mis caderas y torso de 19 años han sido bastante manipuladas. Éstas son el tipo de cosas que provocan que las mujeres se sientan inseguras y crean ideales irreales de belleza. Cualquiera que me conozca sabe que yo defiendo un amor honesto hacia mi misma. Por eso publico la foto real (la de la derecha) que me encanta. Gracias a Modeliste por quitar las fotos y solucionar este problema con el retoque”, escribió la que fuera chica Disney.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.