Prisión incondicional para el pirotécnico de Tui tras su segunda detención

Francisco González Lameiro, el pirotécnico de Tui (Pontevedra) que almacenaba toneladas de explosivos en depósitos ilegales, uno de los cuales detonó el miércoles pasado provocando dos muertes e ingentes daños materiales, ingresará este martes en la cárcel. Tras su segunda detención, provocada por la aparición de dos nuevos depósitos de sustancias explosivas este fin de semana, la titular del Juzgado de Instrucción 1 de Tui ha acordado su prisión provisional comunicada y sin fianza.

El empresario pirotécnico pasa ahora a estar investigado por delito de riesgo catastrófico, tenencia ilícita de explosivos y homicidio, daños y lesiones con carácter imprudente. La juez entiende que, tras la aparición este fin de semana de los nuevos depósitos, cuya existencia no mencionó el detenido en su primera declaración judicial, las circunstancias han cambiado. Considera la magistrada, además, que existe riesgo de alteración de fuentes de prueba y de reiteración delictiva.

La juez instructora justifica el aumento de riesgo de fuga, pese al arraigo del empresario, al valorar la posibilidad de que la que la pena impuesta sea mayor. Fuentes de la investigación han asegurado a este diario que la puesta en libertad del imputado de la semana pasada tras la deflagración mortal obedeció a una estrategia para poder localizar posibles nuevos depósitos de explosivos, como finalmente ocurrió.

González Lameiro fue detenido por segunda vez este lunes cuando acudió a prestar declaración al cuartel de la Guardia Civil. Este martes pasó a primera hora a disposición judicial, acusado de tenencia ilícita de explosivos, tras pernoctar en la Comandancia de Pontevedra. Cuando se dirigía hacia los juzgados, uno de los vecinos cuya vivienda, anexa a almacén clandestino que saltó por los aires el miércoles pasado, quedó destruida por la deflagración, intentó propinarle un puñetazo. Otros vecinos se dirigieron al detenido a gritos de "¡sinvergüenza!" y lo increparon preguntándole por qué no había guardado los explosivos en su propia vivienda.

A la espera de lo que desvele el informe de los artificieros de la Guardia Civil, la investigación apunta hacia la posible comisión por el dueño de la pirotecnia La Gallega de un nuevo delito: negligencia en la conservación de los explosivos. Para el ministerio público, que no descarta la existencia de más implicados, el detenido “es un peligro” dado que “no respeta las normas” (existen indicios de que el almacén no cumplía los requisitos de conservación ni la ley de tenencia de explosivos) y podría poner de manifiesto que depositó en el galpón “con alguna intención” el material pirotécnico.

Mientras el empresario afronta el procedimiento judicial con tratamiento psiquiátrico, según ha precisado su abogado, ha trascendido que el Ayuntamiento de Tui ha estado comprando hasta este mismo año a su empresa, La Gallega, el material pirotécnico para las fiestas locales. Según ha informado la Televisión de Galicia el Ayuntamiento mantuvo la adquisición en las fiestas de San Telmo de este año (se celebran entre el 31 de marzo y el 9 de abril) cuando ya existía sentencia de clausura sobre la fábrica, que carece de licencia urbanística.

Amparándose en el informe del arquitecto municipal y de otro de un técnico externo, el Ayuntamiento se plantea ahora pedir la declaración de zona catastrófica. Las inspecciones desvelan que el número de viviendas completamente destruidas se eleva a 26. A ellas se suman 49 inmuebles con la estructura muy afectada y 43 más con importantes desperfectos en sus cubiertas. Cuatro personas continúan hospitalizadas.