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Los aspirantes presidenciales de Morena miden apoyos y se vuelcan en la campaña estatal del 5 de junio

Sheinbaum viaja a Oaxaca y Tamaulipas, Ebrard visita Quintana Roo y Aguascalientes y Adán Augusto López apoya al candidato en Hidalgo mientras Monreal crítica los choques internos

El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, este domingo en un acto de la candidata a la gubernatura de Quintana Roo, Mara Lezama.
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, este domingo en un acto de la candidata a la gubernatura de Quintana Roo, Mara Lezama.Elizabeth Ruiz (Cuartoscuro)
Francesco Manetto

Toda campaña es un escenario y la de las elecciones que se celebrarán en seis estados el próximo 5 de junio coincide con una nueva etapa de la carrera de fondo de los aspirantes a suceder a Andrés Manuel López Obrador. Este fin de semana, en la recta final de ese proceso electoral, algunos de los precandidatos favoritos para tomar el relevo al presidente de México en 2024 se han volcado en las giras territoriales arropando a los cabezas de lista de Morena. El contacto con las bases siempre ha sido una manera de medir los apoyos internos y así lo han hecho tres dirigentes de primera línea: Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López.

Cerca de 12 millones de mexicanos están llamados a elegir a sus nuevos gobernadores dentro de dos semanas. La renovación de las administraciones de Quintana Roo, Oaxaca, Hidalgo, Aguascalientes, Tamaulipas y Durango supone una votación de menor alcance que la de hace un año. Sin embargo, la cita es importante para definir los equilibrios entre el movimiento oficialista, que solo o con sus aliados ya gobierna en 18 estados y busca ampliar su poder, y la alianza opositora del PRI, el PAN y el PRD, que quedó muy tocada tras la derrota de las presidenciales de 2018 y pone a prueba su capacidad de resistencia.

La jefa de Gobierno de Ciudad de México viajó el sábado a Oaxaca y este domingo a Tamaulipas para apoyar las campañas de los candidatos Salomón Jara y Américo Villarreal. Para ello pidió permiso o “descuento del día” como máxima autoridad de la capital, dejando a cargo al secretario de Gobierno, Martí Batres, y a su equipo. Desde el estado norteño ha reiterado que el país está listo para tener a una presidenta “¿Por qué las mujeres no pueden aspirar no solamente a puestos de elección popular, sino a desarrollarse de la manera que quieran con la libertad que quieran? Creo que las mujeres estamos preparadas para cualquier cosa y el país también. Es algo que ni siquiera debería preguntarse”, ha manifestado en una declaraciones a los medios.

El secretario de Relaciones Exteriores se desplazó primero a Aguascalientes para acompañar a Nora Ruvalcaba y este domingo voló a Cancún, en Quintana Roo, para sumarse a los actos de Mara Lezama. El canciller, inmerso en los últimos días en la negociación con Estados Unidos previa a la participación de México en la Cumbre de las Américas, también ha colgado por unas horas el traje institucional para vestir la camiseta de dirigente de Cuarta Transformación, el proyecto de López Obrador. Ebrard fue aclamado a principios de mayo al grito de “presidente, presidente” durante un acto en Hidalgo y es junto con Sheinbaum el aspirante mejor posicionado, según los estudios de opinión, que siempre recogen también los nombres del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, y del jefe de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal.

El primero empezó a figurar en las quinielas, el llamado “club de las corcholatas”, hace meses. Exgobernador de Tabasco, el estado del mandatario, es uno de los hombres clave para López Obrador tanto en el Ejecutivo como en las filas del partido. Este fin de semana visitó Hidalgo para respaldar al candidato Julio Menchaca y también fue recibido entre vítores. Hay en Morena quien ve en él un equilibrio entre los perfiles de Sheinbaum y Ebrard, aunque su mayor obstáculo es la escasa proyección pública.

Monreal, veterano legislador, se quedó en Ciudad de México para clausurar una exposición sobre su tierra natal, Zacatecas, en la antigua sede del Senado. Advirtió de que no regresará hasta 2030, un guiño al próximo sexenio, pero antes difundió en sus redes sociales un video en el que formula críticas al proceso de selección interna. Todos estos altos cargos del oficialismo han manifestado su deseo de participar, pero el senador sostiene que el presidente le ha excluido preventivamente de la carrera y por ello ha lamentado las fricciones internas.

“Las campañas anticipadas aquí y en cualquier país cuando estas tempranamente se desatan y se desarrollan generan rispideces o al interior de los partido que las postulan o al interior del sistema. Era una regla política ubicada en la ortodoxia: el presidente o el primer ministro tenía que aguantar, tenía que durar el tiempo correcto para que no se presentara ninguna vicisitud o ningún movimiento extraño que provocara inestabilidad en el Gobierno o en la economía”, indicó. “Hoy el presidente López Obrador, desde junio del año pasado, promovió impulso y destapo una serie de personas, todas miembros de su gabinete, para sucederle. Lo que él llamó el club de las corcholatas que son los que a su juicio deben sucederle. Sin embargo, esta anticipación puede provocar fisuras dentro de quienes aspiramos a este proceso abierto y democrático”, ha advertido antes de hablar de “descalificaciones, insultos o diatribas”. “Esperamos que esto no se traduzca en acciones físicas en detrimento de algunos de los aspirantes que legítimamente deseamos contender. Fue a destiempo, desde mi punto de vista. Ahora hay que intentar serenar los ánimos”, ha agregado en referencia a los exabruptos de algunos simpatizantes. López Obrador ha asegurado que optó por adelantar la carrera interna precisamente para evitar especulaciones y mantiene que se acabó la práctica del destape.

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Sobre la firma

Francesco Manetto
Es editor de EL PAÍS América. Empezó a trabajar en EL PAÍS en 2006 tras cursar el Máster de Periodismo del diario. En Madrid se ha ocupado principalmente de información política y, como corresponsal en la Región Andina, se ha centrado en el posconflicto colombiano y en la crisis venezolana.

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