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Sheinbaum da un impulso a su imagen nacional tras la estela de la revocación de mandato

La alcaldesa de Ciudad de México sella su compromiso incondicional con la consulta, una apuesta personal de López Obrador, mientras avanza la carrera de la sucesión

Francesco Manetto
La jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, saluda durante un mitin en defensa de la reforma eléctrica.
La jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, saluda durante un mitin en defensa de la reforma eléctrica.Isaac Esquivel (EFE)

Una nueva fotografía que trasciende su significado más literal. Todo ecosistema político está hecho de acciones y omisiones. De gestos, en definitiva, y para la Cuarta Transformación, el proyecto político de Andrés Manuel López Obrador, es especialmente relevante lo que se vio la tarde del miércoles. El cierre de campaña para llamar al voto este domingo en la consulta sobre la revocación de mandato ofreció una imagen en la que hablaron los presentes, pero también lanzaron su mensaje los ausentes. El multitudinario acto sirvió a Claudia Sheinbaum, una de las dirigentes más próximas al presidente, para sellar su compromiso incondicional con este referéndum, una apuesta personal de López Obrador. Para ser la primera en estar a su lado. Pero también para impulsar su imagen nacional en una fase del sexenio cada vez más decisiva para los equilibrios internos de Morena y la carrera de la sucesión.

La jefa de Gobierno de Ciudad de México fue la protagonista del mitin, convocado en principio para cerrar filas con la reforma eléctrica. Desde el escenario instalado frente al Monumento a la Revolución de la capital dio la enésima muestra de respaldo al mandatario después de semanas de continuos llamados de atención del Instituto Nacional Electoral (INE) por no respetar la llamada veda. Es más, la política aprovechó su turno para arremeter contra el árbitro y acusarle de carecer de “autoridad moral”. Junto a ella, en la tarima estaban algunos de los cargos del ala más ortodoxa del Gobierno y del movimiento obradorista. El dirigente nacional del partido, Mario Delgado, la secretaria de Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde, y el portavoz del Gobierno, Jesús Ramírez.

Sheinbaum arropó al presidente delante de decenas de miles de personas, mientras otros de los aspirantes a tomarle el relevo siguieron con sus actividades. El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, por ejemplo, lleva semanas alejado de la agenda personal de López Obrador. Recién llegado de una gira por Oriente Próximo, el miércoles estuvo en Puebla en una reunión para que ese estado acompañe a la Cancillería en futuros viajes oficiales, según anunció a través de sus redes sociales.

Ricardo Monreal, jefe de la Junta de Coordinación Política del Senado, este jueves se ha pronunciado sin disimulos sobre el mitin de la alcaldesa. “Es la jefa de Gobierno y obviamente todo el mundo sabe que es una aspirante desde el momento mismo que el presidente lo dio a conocer. A mí no me parece anormal, me parece normal que esté en ese proceso y que esté luchando dentro de Morena para participar”, ha afirmado al ser preguntado por un “destape” de la dirigente. “No voy a hablar mal de ella, no creo que sea el momento, le deseo suerte”, ha aclarado al dibujar también su propia hoja de ruta. “Nosotros vamos a seguir trabajando por lograr la simpatía, vamos a participar en su momento como candidatos a la presidencia de la República y vamos a inscribirnos en Morena”, ha continuado antes de enfatizar que sigue trabajando en el Senado y que es “estricto en el cumplimiento de la ley”.

La carrera presidencial ya empezó, en la práctica, el pasado verano y desde entonces todos los que mostraron interés en participar en el proceso interno de selección se han ido moviendo en dos direcciones. Esto es, acercándose a López Obrador o tratando de construir un perfil propio. El mandatario ha sugerido en más de una ocasión su perfecta sintonía con Sheinbaum, sin embargo, no se ha decantado por ninguno, al menos públicamente. La más reciente encuesta de SIMO Consulting para EL PAÍS, realizada entre el 8 y el 12 de marzo, situaba al secretario de Relaciones Exteriores a la cabeza de la intención de voto en dos escenarios: en una lista virtual de candidatos de todos los partidos (un 56%) y entre los aspirantes de Morena (un 34%). Pero siempre le pisa los talones la jefa de Gobierno, con un 54% y un 30% de las preferencias, respectivamente.

Todavía faltan más de dos años para las elecciones presidenciales de 2024, pero el apoyo, directo o indirecto, de López Obrador será determinante en una votación interna, sobre todo en un movimiento tan vinculado al líder. La alcaldesa, mientras tanto, ha vuelto a manifestar este jueves su lealtad al jefe de Estado. Lo ha hecho con una fotografía que recuerda el voto del desafuero de López Obrador en la Cámara de Diputados, cuando este era jefe de Gobierno del Distrito Federal, el 7 de abril de 2005. Entonces Sheinbaum ya formaba parte de su equipo como secretaria de Medio Ambiente de la capital. “A 17 años del desafuero seguimos diciendo: sí, es un honor…”, ha escrito en Twitter.

Su cierre de filas con el revocatorio en las últimas semanas solo es comparable con el repentino arrojo mostrado por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, que viajó a los Estados de Coahuila y de Sonora para hacer campañas, exponiéndose también a una sanción de la autoridad electoral. Otro dirigente de máxima confianza del presidente, que habitualmente trabaja más agazapado en segunda fila y que de repente dio un paso al frente por defender a su jefe. Lo que demuestra que la consulta sobre revocación de mandato será también, en buena medida, una herramienta para medir fidelidades en las entrañas de la Cuarta Transformación.

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Sobre la firma

Francesco Manetto
Es editor de EL PAÍS América. Empezó a trabajar en EL PAÍS en 2006 tras cursar el Máster de Periodismo del diario. En Madrid se ha ocupado principalmente de información política y, como corresponsal en la Región Andina, se ha centrado en el posconflicto colombiano y en la crisis venezolana.

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