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El fútbol mexicano lanza un grito en contra de la violencia

A una semana de la batalla campal en Querétaro, que dejó 26 heridos y 20 detenidos, la Liga MX se llena de gestos para evitar a toda costa cualquier agresión

Diego Mancera
Jugadores de las Chivas, del América y los árbitros se abrazan para pedir paz en el fútbol mexicano.
Jugadores de las Chivas, del América y los árbitros se abrazan para pedir paz en el fútbol mexicano.ULISES RUIZ (AFP)

El fútbol mexicano ya no es el mismo. El episodio en Querétaro quebró el guion en México tras la violencia desenfrenada en las tribunas. Siete días después de la peor imagen en un campo de fútbol, ahora cientos de aficionados protestaron con camisetas blancas durante el mayor clásico del país, el Chivas-América, para pedir paz.

La batalla campal en el estadio La Corregidora del pasado 5 de marzo provocó múltiples lesiones a 26 personas y, de acuerdo con los datos oficiales, no hubo muertos. Las brutales imágenes donde se veían a aficionados del Atlas desnudos y encima de charcos de sangre escandalizaron a México y al mundo. La Fiscalía de Querétaro ha detenido 22 personas, incluido un hombre que fue llevado por su propia madre frente a las autoridades y otro acudió por su cuenta propia.

Eso provocó que desde los despachos de la Liga MX promovieran campañas para desligarse de la violencia de los hinchas radicales. La primera fue la de impulsar el mensaje familiar de “grita por la paz” en todas sus divisiones, incluida la Liga femenina donde, desde su creación en 2017, nunca ha ocurrido un acto de violencia y donde tampoco aparecen los cánticos homófobos y machistas en los partidos masculinos. Durante los partidos de la décima fecha del campeonato mexicano, ambos equipos salieron juntos a tomarse la típica fotografía antes del silbatazo. En el minuto 62, los jugadores de los dos clubes y los árbitros se han juntado en el medio del campo para abrazarse en círculo para pedir paz. Fue en el minuto 62 cuando se tuvo que suspender el Querétaro-Atlas de la semana pasada.

Los aficionados en las tribunas del estadio Akron, en Guadalajara, vestidos de blanco por la paz.
Los aficionados en las tribunas del estadio Akron, en Guadalajara, vestidos de blanco por la paz.Fernando Carranza (CUARTOSCURO)

El Gobierno del Estado de Aguascalientes pidió que el partido entre Necaxa y Querétaro, jugado el pasado viernes, se realizara sin aficionados como una forma de empatía. En el clásico de México, la directiva del Guadalajara le prohibió la entrada a sus barras bravas y puso butacas en la zona del estadio que le correspondía a su porra. Según han avanzado las autoridades del fútbol mexicano, ya comenzó la cruzada contra todas las barras. Además, junto con el América pidieron que todos los aficionados fuesen vestidos de blanco para pedir por la paz, sin embargo, en el encuentro zumbaba el grito peyorativo de “puto”, que ha costado multas económicas y castigos por parte de la FIFA.

A partir de este fin de semana la seguridad de todos los estadios corresponde exclusivamente a las autoridades locales y ya no recaerá en empresas privadas. El caos en Querétaro se desató por el fracaso de la empresa de seguridad que no logró controlar con 600 agentes a más de 15.000 aficionados. No tenían preparación ni equipo en caso de actuar. El presidente de la Liga MX, Mikel Arriola, contó en entrevista con EL PAÍS que la responsabilidad recayó en este grupo de seguridad privada y en las autoridades de Protección Civil y la policía.

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Sobre la firma

Diego Mancera
Es coordinador de las portadas web de la edición América en EL PAÍS. Empezó a trabajar en la edición mexicana desde 2016 escribiendo historias deportivas. Es licenciado en Ciencias de la Comunicación y Periodismo por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

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