El frenético circuito de Arabia Saudí deja a un Checo Pérez fuera de combate

La noche en Arabia Saudí fue caótica para la Fórmula 1. Checo Pérez, que peleaba para alcanzar el tercer lugar en el Mundial de pilotos de la Fórmula 1 frente a Valtteri Bottas, quedó fuera de la carrera. Era apenas la vuelta 16. Ya habían detenido la carrera por un choque de Mick Schumacher y el mexicano peleaba por escalar posiciones en esta penúltima carrera de la temporada. Lewis Hamilton, con el coche dañado, se quedó con la victoria y Max Verstappen fue segundo. Con esto, todo se resolverá en el último fin de semana de la temporada en Abu Dabi. Tanto Hamilton como Verstappen están empatados en puntos.

Checo Pérez inició la carrera en el circuito de Jeddah en la quinta plaza. Verstappen desde la tercera posición detrás de los dos Mercedes. La clasificación fue un suplicio para Red Bull en la penúltima fecha del campeonato. El mexicano intentó superar a Charles Leclerc, pero tuvo problemas para pasarlo y tuvo que recular antes de chocar. También debía defenderse de un Lando Norris que quería aprovechar la posición.

Lo angosto del carril complicaba los adelantamientos. El mexicano lo pasaba mal. Antes de la vuelta 10, el Haas de Schumacher se estrelló y provocó el safety car. Red Bull llamó al mexicano al garaje. Pérez tuvo una cambio de neumáticos de 2,2 favorable. Pero no serviría de nada. Los Mercedes cambiaron llantas, excepto Max Verstappen. Eso provocó que el mexicano terminara en la octava posición. La carrera se detuvo al giro 14 para reparar los muros de contención. La forzada parada favoreció a Verstappen, pero frustró a Pérez que seguía octavo.

En la relanzada, volvió el caos. Pérez adelantó a Leclerc y se estaba tirando el auto con el McLaren de Lando Norris. El de Red Bull iba a la pelea por un mejor puesto, pero el neumático delantero de Leclerc hizo contacto con su Red Bull y el mexicano dio un giro. Todo se frustró para el mexicano antes de la vuelta 16. “Se olvidó que estaba ahí”, dijo el piloto monegasco. “No hay nada que hacer, Checo”, le comentaron al mexicano que a más de uno insultó por la radio. El enojo no era casual: perdía más terreno para pelear por el tercer puesto de pilotos y, claro, el Mundial de constructoras. Mercedes sonreía desde el centro de control. “Era una pista complicada. Charles tampoco tenía mucho dónde ir. Es una pena lo que sucedió. Mercedes ha sido muy fuerte”, comentó el mexicano tras la carrera a F1TV.

Dos banderas rojas, dos interrupciones que aún dejaban abierta la batalla por la punta entre Verstappen y Hamilton. Los dos pilotos sacaron los codos para no dejar ni un espacio. El holandés le cerraba el paso en cada intento de adelantamiento y, a falta de 10 vueltas, el alerón delantero de Hamilton se estrelló con el auto rival cuando le pedían al de Red Bull darle el lugar al británico. Toda una anarquía. Al giro 42, Verstappen le cedió el lugar, pero de inmediato atacó. La agresividad tuvo que aplacarse cuando Hamilton le pasó por delante y se quedó con la punta. Triunfo del británico. La alegría aumentó cuando Bottas se quedó con el tercer lugar en el último suspiro. Hamilton, siete veces campeón del mundo, quiere ensanchar su leyenda. Verstappen tiene la última palabra.

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