Republicanos se aferran a las armas al expulsar a dos legisladores negros en Tennessee
La polémica exclusión de los congresistas Justin Jones y Justin J. Pearson por una protesta antiarmas se convirtió en un drama en Estados Unidos
Por tercera vez desde la Guerra Civil, en Estados Unidos se han expulsado a dos legisladores de sus puestos. Los representantes Justin Jones y Justin J. Pearson, ambos de raza negra, fueron destituidos en una polémica sesión, luego de participar en una protesta para exigir mayor control de la venta de armas en el Estado de Tennessee.
La tormenta política inició con el tiroteo en una escuela privada de Nashville, el pasado 27 de marzo, en el que murieron seis personas. La masacre despertó protestas estudiantiles, una de ellas a las puertas de la Cámara de Representantes local. Durante la sesión del 30 de marzo, tres legisladores demócratas interrumpieron la sesión legislativa para vociferar consignas contra la violencia de armas.
En respuesta, el 6 de abril, la Casa de Representantes, con una mayoría de votos republicanos, aprobó la destitución de Jones y Pearson. La tercera legisladora que participó en la protesta, Gloria Johnson, no recibió suficientes votos en su contra. Después declaró que se había salvado de ser expulsada por ser blanca.
La medida despertó una nueva oleada de manifestaciones. Un día después del voto de destitución, la vicepresidenta Kamala Harris se reunió con los demócratas sancionados.
La presión colectiva surtió efecto y esta semana ambos representantes fueron reinstaurados en sus cargos. En el caso de Jones, se llevará a cabo una elección especial para reemplazarlo del puesto, pero él también puede presentarse como candidato.
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