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Egan Bernal y Colombia lloran la muerte de un niño ciclista

El rostro de Julián Esteban Gómez se conoció cuando lloró de emoción por el triunfo del colombiano en el Tour de Francia y este fin de semana murió tras ser arrollado por un camión

Catalina Oquendo
Julián Gómez, en 2019, mientras seguía a través de una pantalla gigante al héroe local, el ciclista colombiano de Ineos Egan Bernal, campeón del Tour de Francia
Julián Gómez, en 2019, mientras seguía a través de una pantalla gigante al héroe local, el ciclista colombiano de Ineos Egan Bernal, campeón del Tour de Francia.Luisa González

En muchas casas colombianas se sufren y se lloran como propias las alegrías que da el ciclismo. Transitar por las carreteras del país andino repletas de personas pedaleando es entender por qué este, y no el fútbol, es el deporte nacional. Pero este fin de semana no fue para celebrar: Colombia está conmocionada y de luto por la muerte de Julián Esteban Gómez, un niño ciclista, que fue atropellado por un tracto camión cuando entrenaba en una vía de Zipaquirá, a 40 kilómetros de Bogotá.

Las voces de dolor por el trágico fallecimiento han llegado desde todos los rincones. Egan Bernal, el ganador del Giro de Italia y del Tour de Francia, publicó un sentido video para recordarlo. “Hoy lloramos por ti Julián, el verdadero orgullo de mi patria”, escribió sobre el menor de 13 años, mientras el presidente Iván Duque dijo que recibía la noticia con “profundo dolor” y enviaba solidaridad y oraciones a la familia.

El rostro de Julián le había dado la vuelta al mundo en 2019 cuando lloró de emoción por el triunfo de Bernal. En la plaza de Zipaquirá, subido sobre su bicicleta y con el casco puesto, vio cómo Egan se convirtió en el primer colombiano en coronarse campeón del Tour. Su llanto incontenible se convirtió en la imagen de la alegría del país en ese momento. “Apenas llegó le di un abrazo muy grande y le dije que quería ser como él, que quería luchar por mis sueños. Me dijo que me iba apoyar y le respondí que muchas gracias”, contó el niño cuando Egan visitó Zipaquirá, la tierra natal de ambos.

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Según el testimonio de Guillermo Caicedo, tío de Julián y quien lo acompañaba en el entrenamiento, el niño fue víctima de la intolerancia del conductor de un camión. “(Venía) acosándonos con las cornetas, se nos arrimó demasiado, el niño se puso más nervioso que yo y perdió el equilibrio, cayó en las ruedas de la mula y murió de forma instantánea”, dijo su tío.

El conductor del tracto camión se bajó y le recriminó al tío por transitar por la carretera y no por una ciclorruta, pero él argumentó que no son aptas para entrenamientos. Posteriormente, el hombre se entregó a la Policía y fue liberado horas después, aunque continúa vinculado a la investigación por homicidio culposo.

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El hecho abrió un debate sobre el riesgo que enfrentan miles de ciclistas en las carreteras del país. De acuerdo con el Observatorio Nacional de Seguridad Vial, solo en el año 2020 fallecieron 154 usuarios de bicicleta en carreteras y calles del país. De ellos, 33 fueron víctimas de camiones de carga o tracto camiones.

“Hay mucho conductor intolerante que les da rabia ver a los ciclistas y les arriman el carro. Todos los días se corre peligro montando en bicicleta”, agregó el tío del niño a medios locales. “A quién no le duele que un niño con esas ilusiones de ser un gran ciclista termine en las ruedas de una mula”, agregó.

En Zipaquirá, en el lugar donde hay un mural con las imágenes de Egan Bernal y de Julián Gómez, cientos de personas siguen llegando para velar y llorar al niño.

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Sobre la firma

Catalina Oquendo
Corresponsal de EL PAÍS en Colombia. Periodista y librohólica hasta los tuétanos. Comunicadora de la Universidad Pontificia Bolivariana y Magister en Relaciones Internacionales de Flacso. Ha recibido el Premio Gabo 2018, con el trabajo colectivo Venezuela a la fuga, y otros reconocimientos. Coautora del Periodismo para cambiar el Chip de la guerra.

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