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Los militares y la oposición alcanzan un acuerdo para compartir el poder en Sudán

El Consejo Soberano que regirá el país durante una transición de tres años tendrá una presidencia alterna

Manifestantes sudaneses celebran el acuerdo para la transición en en Jartum el 5 de julio de 2019. En vídeo, declaraciones del enviado de la Unión Africana para Sudán.Vídeo: ASHRAF SHAZLY (AFP) / REUTERS-QUALITY
José Naranjo

El consejo militar que gobierna Sudán desde la caída del dictador Omar al Bashir el pasado abril y las fuerzas ciudadanas de oposición agrupadas en la Alianza para la Libertad y el Cambio (ALC) han alcanzado un acuerdo este viernes para la creación de un Consejo Soberano que conducirá al país africano a unas elecciones durante un periodo de transición de tres años. Este órgano estará integrado por civiles y militares y su presidencia será alterna entre ellos, según anunció esta madrugada el mediador de la Unión Africana (UA), Mohamed El Hacen Lebatt.

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Este acuerdo se produce después de semanas de enorme tensión tras el violento desalojo de la acampada de protesta ante el cuartel general del Ejército en Jartum el pasado 3 de junio por parte de los militares. Esta acción desencadenó una oleada de represión que provocó 136 muertos, según los manifestantes. 71, según la cifra que manejaba la junta militar. El acuerdo alcanzado este viernes incluye la apertura de una investigación “minuciosa, transparente, nacional e independiente” por esta masacre, dijo Lebatt en rueda de prensa.

La mediación de la UA y en concreto del primer ministro etíope, Abiy Ahmed, ha sido clave para que ambas partes volvieran a la mesa de negociación. Tras haber mantenido conversaciones a varias bandas, el equipo mediador propuso un Consejo Soberano de 11 miembros, seis civiles y cinco militares, y una Presidencia ocupada durante los primeros 18 meses por un general y el resto del tiempo que dure la transición, al menos otro año y medio, por un civil. La dirección de este órgano y su composición eran el principal punto de fricción de las conversaciones, estancadas desde mayo.

El número dos y auténtico hombre fuerte de la junta castrense, el general Mohamed Hamdan Dagalo, alias Hemeidti, a quien se acusa de estar detrás de la violenta represión del último mes, se felicitó por este acuerdo, según France Presse (Afp). “Queremos tranquilizar a todas las fuerzas políticas y a todos aquellos que participaron en el cambio”, dijo, “este será un acuerdo completo, no excluirá a nadie e incluirá todas las ambiciones del pueblo”. El pacto también contempla retrasar la creación del Parlamento hasta que se establezca el Consejo Soberano.

Las señales de deshielo de los últimos días ya indicaban que el acuerdo podía ser inminente. El miércoles, ambas partes volvieron a verse las caras en negociaciones directas, lo que no ocurría desde el pasado mayo, y este jueves 235 miembros del grupo rebelde Ejército de Liberación de Sudán, que está integrado en la ALC, fueron liberados de una prisión sudanesa tras una amnistía declarada por el presidente del consejo militar, el general Abdelfatah al Burhan.

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Los líderes de la oposición llevan reclamando la cesión del poder a los civiles desde que lograron forzar la caída de Al Bashir. Para los próximos 13 y 14 de julio estaba convocada una nueva marcha de protesta así como dos jornadas de desobediencia civil, que por ahora no han sido anuladas. La UA había suspendido a Sudán como miembro de este organismo panafricano el pasado 6 de junio hasta que el poder fuera transferido a una autoridad civil.

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Sobre la firma

José Naranjo
Colaborador de EL PAÍS en África occidental, reside en Senegal desde 2011. Ha cubierto la guerra de Malí, las epidemias de ébola en Guinea, Sierra Leona, Liberia y Congo, el terrorismo en el Sahel y las rutas migratorias africanas. Sus últimos libros son 'Los Invisibles de Kolda' (Península, 2009) y 'El río que desafía al desierto' (Azulia, 2019).

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