Diez años saben mejor brindando con un whisky 10

No hay cifra más mágica que el 10. Una década es lo que necesita un árbol de media, por ejemplo, para desarrollarse y mostrar toda su exuberancia, según dictan los expertos en arboricultura. Como si de un árbol del conocimiento del universo masculino se tratara, la revista ICON cumple ahora 10 años en pleno esplendor. Una cifra redonda que queremos conmemorar brindando con Ballantine’s 10 American Barrel, un whisky que emplea el mismo tiempo en madurar para alcanzar su expresión más plena. No se trata de una mera coincidencia: ICON y Ballantine’s 10 American Barrel comparten un mismo ADN.

No hay mejor plan que hojear ICON (o navegar por la web) mientras se paladea Ballantine’s 10. Una década de envejecimiento en barricas de roble americano forja el carácter premium de un whisky que transmite la misma calidad que los artículos, columnas y entrevistas de la revista.

En cada página de ICON y en cada sorbo de Ballantine’s 10 aparecen notas de sofisticación. Es un placer compartido que tiene que ver con paladear nuevas sensaciones y apreciar aquello que está hecho con paciencia, mimo y dedicación. Un universo de hedonismo y complejidad que ya se intuyen al acercar Ballantine’s 10 a la nariz para apreciar fruta fresca con manzana roja, grosella negra y ralladura de limón. Además, asoman notas dulces de vainilla, toffee y un toque de nueces.

Cada trago de Ballantine’s 10 resulta, igual que sucede con muchos contenidos de ICON, un descubrimiento: una sensación dulce y cremosa en la que se mezclan notas de tarta de manzana casera y natillas de vainilla, entrelazadas con cuajada de limón, caramelo y, de nuevo, toffee. Sensaciones que ganan en intensidad gracias al paso del tiempo igual que sucede con el retrogusto de este whisky, dulce y suave.

Los placeres persistentes muchas veces son los más satisfactorios. Por eso, repasamos algunos momentos 10 pensados expresamente para brindar con Ballantine’s 10. Ocasiones especiales que se hacen esperar, como Ballantine’s 10, y que no tienen por qué volver a excusarse por la espera para seguir brindando:

• Ese reencuentro con ese alguien especial. No hay mejor manera de aprovechar una sobremesa que ejercitando el arte de ‘ponerse al día’ con esa amistad a la que no vemos desde hace años. ¿El brindis perfecto? Con un Ballantine’s 10 on the rocks, para no perder la ocasión de decirle “perdón por la espera”…

• Sesión de baile ‘retro’. Las modas son cíclicas y no hay estilo musical que no haya conocido un ‘revival’. Imagínate disfrutar de una sesión de jungle o de UK garage, dos estilos de electrónica que, tras explotar hace una década, vuelven por sus fueros, con un cóctel de Ballantine’s 10 en la mano en alguna sala de moda o en una terraza nocturna…

• Pero, ¡qué bien suenan! Son muchos los grupos que, igual que Ballantine’s 10, mejoran con los años o evolucionan de manera exponencial. Ejemplos de madurez son los actuales Arctic Monkeys o Bad Bunny, que empezó a publicar sus primeras canciones en 2013 y ahora es un fenómeno a nivel mundial. Disfrutarlos en directo con un Ballantine’s 10 con cola en la mano es el plan perfecto.

• Revisando aquella serie… que tanto disfrutaste hace 10 años. Es el momento de volver a Breaking bad o The office para reencontrarse con sus personajes con un buen vaso de Ballantine’s 10 a mano. Una sesión única para relajarte desde tu butaca favorita.

• La fiesta más esperada. No hay mejor manera de pedir disculpas por la espera a tus amigos que celebrar finalmente aquella reunión en casa que tanto llevas prometiendo. ¿La mejor bienvenida posible? Un recibimiento con unos cócteles a base de Ballantine’s 10 para dejar claro que los planes que mejor saben son los que más se hacen esperar...