Elisabeth Moss y su recuerdo de ‘Inocencia interrumpida’: un set dividido entre el bando de Winona Ryder y el de Angelina Jolie

Angelina Jolie (California, 48 años) tiene dos Oscar: un Premio Humanitario Jean Hersholt de la Academia, que recibió en 2013 por su ayuda humanitaria, y una estatuilla como mejor actriz de reparto que ganó en el año 2000 por su interpretación en Inocencia interrumpida. La película está basada en el libro de memorias de Susanna Kaysen, que cuenta la vida en un hospital psiquiátrico en los años sesenta, centrado en el ala que trata a mujeres jóvenes con trastornos mentales. Una joven Winona Ryder (Minnesota, 52 años) se llevó el papel protagonista, el de Susanna Kaysen, y los críticos creyeron en la película como el regreso triunfal de la actriz, que ya acumulaba entonces dos nominaciones al Oscar por La edad de la inocencia, en 1994, y Mujercitas, en 1995. Pero, al final, el filme resultó ser la gran coronación en Hollywood de la hasta entonces prácticamente desconocida Angelina Jolie gracias a su papel de Lisa Rowe, una manipuladora paciente diagnosticada de sociopatía. En la película, las dos mujeres se sienten atraídas la una por la otra y el argumento se centra en los altibajos de su relación.

Sin hacer demasiado spoiler, en una de las escenas Susanna y Lisa se pelean fuertemente y acaban tomando caminos separados y opuestos. Pero parece que esa tensa rivalidad traspasó la pantalla y se instaló también en el set de rodaje, según ha contado ahora la también actriz Elisabeth Moss (California, 41 años) en el podcast de Kelly Ripa Let’s Talk Off Camera. Moss, conocida sobre todo por su papel protagonista en la serie El cuento de la criada, tenía apenas 15 años cuando rodó Inocencia interrumpida, en la que interpretaba a Polly Antorcha Clark, una víctima de quemaduras que sufre esquizofrenia. “Había dos tipos de campamentos fuera de cámara, pero basados en el guion. Estaba el campamento de Winona Ryder y el campamento de Angelina Jolie”, explica la intérprete 25 años después del estreno de la cinta. “Yo estuve en el campamento de Winona Ryder. El campamento de Angelina Jolie era realmente guay, pero me sentí intimidada por ellos. Ni siquiera pensaba en poder entrar en ese grupo”, reconoce.

La actriz, que está en plena promoción de su nueva miniserie, The Veil, asegura durante la entrevista que ha hablado con Angelina Jolie después de esa experiencia “y es encantadora”, pero que en ese momento “fue increíblemente intimidante”, según describe. “Nunca lo mencioné. De todos modos, estoy segura de que ella no tendría ni idea de lo que estoy hablando. Definitivamente, no era lo suficientemente guay como para estar en su campamento”, comenta.

La propia Ryder, que también fue productora ejecutiva de la película, aludió a esta división fuera de cámaras en una entrevista de 2010 con el Sydney Morning Herald. El titular era claro: Por qué Angelina Jolie no es mi amiga. En él, la actriz de Stranger Things admitía que nunca se hizo buena amiga de Jolie durante la realización de la película, a pesar de que ella estaba convencida de que así sería: “Recuerdo que pensé: ‘Oh, vamos a llegar a ser grandes amigas’. Pero creo que ella necesitaba poder verme solo como el personaje de Susanna, no como Winona, así que de una manera muy respetuosa simplemente mantuvo su distancia”. Y esa distancia, según dijo, se ha mantenido a lo largo de los años. “La vi en una de las entregas de premios, pero no la he vuelto a ver desde entonces”, reconoció entonces Ryder. “Lo que ha logrado después de la película en términos humanitarios, estoy muy feliz de que lo haya hecho. Recuerdo que en el viaje de prensa de Inocencia Interrumpida ella era muy abierta sobre sus problemas y luego yo entraba y todos pensaban que era una aburrida. Así que es realmente genial ver que ha encontrado su vocación en su vida personal”, celebraba la actriz, dejando entrever esa sonada rivalidad entre ambas.

Ryder también ha contado en más de una ocasión que ha arrastrado graves problemas de ansiedad desde pequeña. “Había tenido ataques de pánico desde los 12 años, probablemente por la presión de trabajar y luego pasar por la adolescencia en la pantalla”, contó en 2016 al medio sobre salud mental Highly Sensitive. De hecho, decidió internarse voluntariamente en un hospital psiquiátrico a principios de los años noventa para tratar de aminorar su ansiedad, una etapa compleja que revivió al realizar esta película junto a Angelina Jolie. “Fue muy aterrador, porque mi papel reflejaba muchas cosas por las que había pasado”, dijo durante la promoción del filme a Entertainment Weekly. “Me aterrorizaba interpretar un personaje que estaba lleno de miedo y ansiedad sabiendo que yo había estado llena de miedo y ansiedad, y no es algo que esté solamente en mi pasado, porque es algo con lo que luchas toda tu vida”.

Para Moss, a pesar las tensiones, participar en Inocencia interrumpida fue “una experiencia increíble”, según cuenta en el podcast: “Tenía 15 o 16 años. Mi mamá todavía estaba conmigo yendo al set. Estuve con todas estas estrellas de cine. ¡Winona Ryder! ¡Angelina Jolie! ¡Clea DuVall! ¡Britney Murphy! Este increíble elenco de mujeres. Era como caer en el Mago de Oz. Me impresionó mucho mi entorno y trabajar con Winona y Angelina, y fueron tan diferentes e interesantes”.