Suri Cruise cumple 18 años: llega a la mayoría de edad y será libre para hablar de sus padres

La hija de los actores Tom Cruise y Katie Holmes vive distanciada de su padre desde el divorcio de la pareja en 2012, cuando se marchó a vivir con su madre a Nueva York para llevar una vida sorprendentemente normal

Katie Holmes y Suri Cruise en Upper West Side de Nueva York el 22 de julio de 2019.Gotham (Getty Images)

La primera vez que el mundo vio la cara de Suri Cruise, por entonces ya el bebé más famoso del planeta, la criatura tenía apenas cinco meses. Pero pese a su corta edad se había colocado en el lugar central de la portada de Vanity Fair y aparecía en todo su temprano esplendor, retratada por nada menos que por la fotógrafa Annie Leibovitz. La fotografía, así co...

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La primera vez que el mundo vio la cara de Suri Cruise, por entonces ya el bebé más famoso del planeta, la criatura tenía apenas cinco meses. Pero pese a su corta edad se había colocado en el lugar central de la portada de Vanity Fair y aparecía en todo su temprano esplendor, retratada por nada menos que por la fotógrafa Annie Leibovitz. La fotografía, así como el reportaje que la acompañaba (con varias imágenes más), certeramente titulado ¿Alguien quería verme?, daba una idea de las cotas de popularidad de la pequeña. De aquello han pasado 18 años (menos cinco meses). Los que cumple este 18 de abril la joven, ya adulta, hija de los actores Tom Cruise y Katie Holmes. Su popularidad no es hoy tan inmensa, sino que la palabra que más la define es hermetismo. Y eso es justo lo que ahora, con su mayoría de edad (en el Estado de Nueva York es a los 18 años, no a los 21), puede cambiar, porque será libre para hablar de sus mediáticos padres si le place. Más difícil ya es que, efectivamente, cambie.

La discreción es hoy día el sinónimo de Suri Cruise. En realidad, la normalidad. No es que se esconda por Nueva York, donde vive con su madre desde hace más de una década. Es que hace una vida plena. Es normal verla de compras, paseando, con compañeros de estudios, en una cafetería... cualquier cosa que una chica de su edad pudiera hacer. Una vida muy distinta de la de sus primeros años, cuando cada uno de sus movimientos, gestos, looks y caprichos infantiles eran analizados. Sin levantar un palmo del suelo era habitual de las publicaciones de moda y tendencias. Las cámaras la seguían allá donde fueran. Como comentó su madre en una entrevista (algo poco usual en ella) hace cuatro años con la revista InStyle, llevaba a la niña al parque a las seis de la mañana para no ser perseguidas.

De pequeña no tuvo una vida normal. Pero probablemente nunca lo sea del todo, al tener Suri el apellido Cruise, y ser Tom una de las más grandes estrellas del firmamento cinematográfico global. Eso sí, la relación padre e hija es escasa. Según medios estadounidenses como Page Six, no se ven desde el año 2012, aunque él estaría obligado a pasarle una pensión de 400.000 dólares anuales que, precisamente, acabará ahora con la mayoría de edad —el actor deberá seguir haciéndose cargo de los gastos médicos y educativos de Suri—.

El verano de 2012 fue en el que se conoció la separación de la hasta entonces mediática pareja formada por Holmes y Cruise. Su relación, expuesta de manera constante en los medios (¿quién olvida los saltos de un emocionado Tom Cruise en un sofá durante una entrevista con Oprah Winfrey en 2005?), culminó en una enorme boda en un castillo italiano en noviembre de 2006 ante 250 invitados, la pequeña Suri entre ellos. Pero la Cienciología, a la que el actor pertenece y es fiel, siempre fue una más en el matrimonio, hasta acabar con él. La intérprete nunca entró en el culto, y sobre todo no quiso que su hija participara de él, y la separación fue total. Las dos pusieron tierra de por medio ese mismo verano para marcharse a Nueva York y dejar a Cruise en Los Ángeles (donde vive, a caballo con el Reino Unido). Él sigue muy vinculado a la secta, y según han contado antiguos miembros de la misma que les han conocido y han pasado por situaciones similares, ya es como si Katie y Suri no existieran para ellos. Cuando un miembro abandona la iglesia, a menudo su familia le da de lado, e incluso puede también ser expulsada de la misma, algo que no ha ocurrido con el actor. Solo ellos tres (y sus abogados) conocen los hechos concretos, pero es difícil que cualquiera de ellos hable al respecto, pese a que Suri podría hacerlo desde hoy mismo.

Suri y Tom Cruise en un paseo por un río en Cambridge, Massachusetts, en octubre de 2009.James Devaney (Getty Images)

Antes de su relación con Katie Holmes, Cruise tuvo otros dos hijos, Bella y Connor. Los adoptó junto a Nicole Kidman mientras estuvieron casados. Ahora tienen 31 y 29 años y siguen manteniendo una buena relación con el actor, aunque no ya con Kidman. “Son adultos. Son capaces de tomar sus propias decisiones. Han tomado la decisión de ser cienciólogos y como madre, mi trabajo es amarlos”, afirmaba la actriz en 2018. Bella se casó hace años sin la presencia de su madre y ha llegado a ser predicadora de su culto. De hecho, para Katie Holmes observar el desarrollo en la Cienciología de los dos jóvenes, por entonces apenas unos niños, fue lo que en parte la movió a alejar a Suri de ese camino.

La vida de madre e hija cambió mucho hace algo más de una década, pero en esta década apenas ha cambiado. Ambas viven en Manhattan tranquilas y en mutua compañía. Holmes mantuvo en secreto una relación con el actor Jamie Foxx que no se conoció casi hasta su final. Empezaron a verse en 2013, pero fue en 2017 —cuando pasaron cinco años desde su divorcio con Cruise; según algunos medios estadounidenses ella tenía una cláusula que le prohibía hacer público cualquier romance— cuando se supo de su unión. Posaron juntos en mayo de 2019, pero en agosto de ese año terminó su noviazgo. Más tarde se la ha relacionado con cocineros, actores... de manera casual. A Suri los paparazzis por el momento todavía no la persiguen buscándole novio ni novia. Quizá, por una vez, la normalidad ha salido ganando.

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