El Ayuntamiento de Madrid deja en tierra de nadie el proyecto de un museo sobre Robert Capa
El Consistorio anuncia la creación de un centro cultural polivalente en el edificio de la calle de Peironcely 10, pero evita referirse al fotoperiodista húngaro
En el barrio madrileño de Entrevías, rodeada por edificios en la esquina de la calle de Peironcely, se encuentra una casa bajita, de estilo neomudéjar, tapiada y con rasgaduras en su fachada de color arcilla debido al abandono. Este rinconcito de Vallecas es uno de los testigos de los bombardeos de Madrid durante la Guerra Civil y pasó a la historia al ser retratada por el legendario fotoperiodista Robert Capa en 1936. La Fundación Anastasio de Gracia y la plataforma #SalvaPeironcely10 quisieron convertirlo en el Centro Robert Capa, un museo dedicado al fotoperiodista, y presentaron un anteproyecto. Sin embargo, la directora general de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Madrid, Elena Hernando, declaró este martes en la comisión de Cultura que “se trata de una propuesta conceptual y no de un anteproyecto arquitectónico”. Por ello, pese a “que tendrán en cuenta lo recogido en el anteproyecto”, rehabilitarán el edificio pero, por el momento, no para usarlo como museo.
Así, el Ayuntamiento reconstruirá el edificio para construir un lugar con “espacios polivalentes para la celebración de actividades culturales”, pero esperarán a que la reparación haya concluido —hacia principios de 2027— para decidir cuál será su función concreta. Sí que han confirmado que recrearán una de las viviendas originales. Fuentes del área de Cultura consideran que aún es pronto para asignar un proyecto al edificio de Peironcely 10, pues se encuentra “en unas condiciones muy precarias” y se trata de una recuperación “muy delicada”.
Para Jorge Donaire, concejal del Grupo Socialista y secretario de Cultura de este partido en Madrid, “este cambio de parecer es incomprensible” (el anteproyecto se encargó en la anterior legislatura, también del PP) y avanza que presentará unas enmiendas para luchar por el proyecto. El Ayuntamiento niega un cambio de opinión y mantiene que se decidirá si, finalmente, termina siendo un museo dedicado a Capa, fundador de la prestigiosa Agencia Magnum, ganadora del premio Princesa de Asturias este 2024,“cuando terminen las obras”.
La nueva propuesta ha sido recibida con sorpresa y decepción en el Encuentro Internacional Robert Capa, que se estaba celebrando en el momento en el que Hernando comunicó su decisión. El evento, organizado por la Fundación Anastasio de Gracia y las facultades de Ciencias de la Información y de Documentación de la Universidad Complutense, adquirió un cariz más pesimista en cuanto se supo que, por el momento, el Centro Robert Capa no se iba a llevar a cabo. José María Uría Fernández, director del área de cultura de la fundación, considera que “es realmente triste ver cómo en Europa los proyectos sobre Capa salen adelante, pero en España no quieren verlo”.
Uría señala que ya hay un centro cultural polivalente en el barrio, el centro Lope de Vega. Explica que en los 180 metros cuadrados del edificio del número 10 de la calle Peironcely “no da para hacer polivalencia” y que el mejor uso que se le puede dar es el de “recoger su propia historia”. Además, apunta la importancia de tener un “centro cultural de primer orden”, como sería el museo, en un barrio como Vallecas: “Han venido a ver el edificio universidades de todo el mundo, periodistas de primer orden y hasta la televisión japonesa”.
Luchando desde 2017
La lucha para convertir Peironcely 10 en el Centro Robert Capa comenzó en 2017, cuando aún vivían familias en las infraviviendas (algunas de 25 metros cuadrados) que alberga el edificio. En 2021, ya habían realojado a todos los vecinos y el edificio pasó a ser propiedad y patrimonio histórico de Madrid. Desde entonces, el bloque está tapiado, a la espera de que se aprobase la propuesta.
El anteproyecto no solo preveía la rehabilitación del edificio, la construcción de una sala de exposiciones coronada por la fotografía —que actualmente atesora el Museo Reina Sofía— y la recreación de una de las viviendas originales, según los planos arquitectónicos de 1927. También querían peatonalizar la calle de Peironcely, montar un museo al aire libre y levantar una estatua de los niños que aparecen en la instantánea. “Esa estatua simboliza el sufrimiento de los niños en las guerras”, manifiesta Uría. De nuevo, el Ayuntamiento decidirá el futuro de esta parte del proyecto en cuanto concluya la reparación. La fotografía refuerza esta idea, “Pobres niños. Aprovechando un momento de calma jugarán en la calle, ante la fachada de su casa acribillada a balazos, a merced de una bomba, de un estallido de granada o del sonido de una ametralladora”, rezaba la portada de la revista suiza Zürcher Illustrierte de diciembre de 1936.
Decenas de personalidades de todo el mundo han apoyado la iniciativa. En 2017, el célebre hispanista Ian Gibson leyó la carta abierta que #SalvaPeironcely10 envió a la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, en la que pedía que declarara el edificio Bien de Interés Cultural. Cynthia Young, que fue conservadora del archivo de Robert Capa en el International Center of Photography de Nueva York, ha visitado el bloque varias veces desde 2018. Fue una de las ponentes del encuentro de este martes, donde abogó por la preservación del edificio “para honrar a la memoria”. Además, dijo que ese inmueble fue “afortunado”, ya que fue el único de los cientos bombardeados que quedó para la historia al ser fotografiado por Capa. A diferencia de sus vecinos, ha sobrevivido al Madrid de los toldos verdes.